El futuro ministro de Relaciones Exteriores de Brasil, Ernesto Araújo, informó de que el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, no fue invitado a la investidura del mandatario electo Jair Bolsonaro el próximo 1 de enero, e instó "a todos los países del mundo" a "unirse para liberar" a la nación caribeña.
Em respeito ao povo venezuelano, não convidamos Nicolás Maduro para a posse do PR Bolsonaro. Não há lugar para Maduro numa celebração da democracia e do triunfo da vontade popular brasileira. Todos os países do mundo devem deixar de apoiá-lo e unir-se para libertar a Venezuela.
— Ernesto Araújo (@ernestofaraujo) 16 de diciembre de 2018
"Todos los países del mundo deben dejar de apoyarlo (a Maduro) y unirse para liberar a Venezuela", dijo en sus redes sociales Araújo, anunciado como el futuro ministro de Relaciones Exteriores de Brasil.
El diplomático afirmó en un tuit que, "en respeto al pueblo venezolano", Maduro no fue invitado a la investidura de Jair Bolsonaro, que se celebrará el 1 de enero en Brasilia.
"No hay lugar para Maduro en una celebración de la democracia y del triunfo de la voluntad popular brasileña", manifestó.
Araújo dirige desde 2016 del Departamento de Asuntos Interamericanos de la Cancillería, se declara admirador del presidente estadounidense Donald Trump, adversario del globalismo y el marxismo, tanto ideológico como "cultural", y ha advertido que combatirá el "alarmismo climático".
Maduro implicó esta semana a Bolsonaro en un supuesto plan para asesinarlo y poner fin a la revolución bolivariana en Venezuela, a raíz de una reunión del gobernante electo brasileño con el asesor de Seguridad Nacional de Estados Unidos, John Bolton.
Bolsonaro, un anticomunista declarado, ha calificado de "dictadura" el Gobierno de Maduro en repetidas ocasiones, si bien siempre descartó apoyar una intervención militar en el vecino país.
"De nuestra parte no existe eso (una intervención en Venezuela). Brasil siempre va a buscar la vía pacífica para resolver los problemas", dijo el mandatario electo pocos días después de ganar las elecciones en Brasil.