El Gobierno cubano estableció el nuevo Arancel de Aduanas que se aplica a las operaciones comerciales realizadas por las personas jurídicas, según recogió la Resolución Conjunta Uno, del 15 de diciembre de 2021, publicada en la Gaceta Oficial número seis Extraordinaria, del 14 de enero de 2022, compuesta por más de 260 páginas con el desglose de las tarifas.
Según publicó la página oficial del Ministerio de Finanzas y Precios, "el nuevo Arancel de Aduanas de la República de Cuba se establece en cumplimiento de obligaciones como país signatario del Convenio Internacional del Sistema Armonizado de Designación y Codificación de Mercancías y como resultado del trabajo de la adecuación nacional a partir de la modificación realizada al Sistema Armonizado de Designación y Codificación de Mercancías de 2017 (SA 2017), por la Organización Mundial de Aduanas (OMA)".
Precisó que "la nomenclatura que se incluye en este Arancel es la del Sistema Armonizado de Clasificación de Productos (SACLAP 2022), establecida en el país mediante la Resolución No. 107, del 5 de octubre de 2021, emitida por la jefa de la Oficina Nacional de Estadística e Información (ONEI)".
"Con la referida Resolución Conjunta Uno, se establecen los aranceles de aduanas de las mercancías, tanto a las que corresponde aplicarles la tarifa general como la de nación más favorecida, que se relacionan por secciones, capítulos, partidas y grupos en el Anexo Único que forma parte integrante de la misma", añadió la nota.
El porcentaje de gravamen general alcanza un 10% del valor para la casi totalidad de mercancías y productos relacionados. Para los casos de "nación más favorecida" se reduce el valor citado entre un 3% y un 5% o incluso algunos están "libre de impuestos".
La resolución establece todas las mercancías importadas por Cuba en más de una veintena de secciones. La primera corresponde a animales vivos y productos del reino animal.
La sección II menciona productos del reino vegetal incluyendo plantas vivas; la sección III, grasas y aceites animales o vegetales, productos de su desdoblamiento, grasas alimenticias elaboradas, ceras de origen animal o vegetal; la sección IV establece las tarifas para los productos de las industrias alimentarias, así como bebidas, líquidos alcohólicos y vinagre, tabaco y sucedáneos del tabaco elaborados.
También hay secciones y capítulos dedicados a material de trabajo, maquinaria, vehículos motores, hasta objetos de arte o colección y antigüedades.
El nuevo Arancel de Aduanas de la República de Cuba se aplica a las operaciones comerciales que realizan las personas jurídicas a partir del primero de enero de 2022.
Sobre los aranceles a las importaciones no comerciales de alimentos, aseo y medicamentos, en diciembre pasado la Aduana informó que prorrogó hasta el 30 de junio de este año la exención arancelaria a estos productos.
El Gobierno cubano tomó esta medida temporal tras las protestas del 11 de julio. Estableció la importación sin carácter comercial de alimentos, aseo y medicamentos, por la vía de pasajeros como equipaje acompañado, sin límites en valor y cantidades, y libre del pago de los aranceles. Con esto intentó controlar el descontento de los ciudadanos por la creciente escasez en la Isla.
Funcionarios cubanos han reconocido el impacto positivo que ha tenido para los cubanos esta medida y, al parecer, apuestan porque solucione la crónica escasez de medicamentos básicos que sufre el pueblo.
El viceministro primero de Finanzas y Precios, Vladimir Regueiro, dijo que la continuidad de la exención excepcional de impuesto se debe a que no han cambiado las condiciones provocadas por el embargo estadounidense, el impacto de la crisis económica mundial y de la pandemia, con la paralización de sectores como el turismo, que condujo al desabastecimiento de bienes y servicios, al encarecimiento de fletes y del precio de las mercancías, entre otros fenómenos.