En Cuba se hace necesaria una discusión sobre la "economía política" de la reforma económica, según reflexiones del economista Pedro Monreal, a raíz de un "compendio" denominado "Ideas, conceptos y directrices del VIII Congreso del Partido Comunista de Cuba", presentado por la cúpula del PCC este fin de semana y que incluye la economía entre sus ocho temáticas.
"Supongo que se refiere más bien a la reforma económica, es decir, a un cambio de políticas económicas", señaló Monreal en un hilo en su cuenta en la red social Twitter.
Para el economista, "existen por lo menos cuatro dimensiones de la reforma que cabría esperar en un documento como el que se anuncia" y cita la "'economía política' de la reforma, 'disciplinar' el sector estatal, la construcción institucional del sector privado y la función del precio y del mercado".
Monreal aclara tres puntos. "Esa reforma se hace para preservar la estructura de poder, es razonable asumir que existirán conceptos ambiguos en el documento (especialmente en relación con la propiedad y el plan), y la potestad para interpretar la ambigüedad la tendría el PCC", sostiene.
"En la literatura económica, 'reforma' es el cambio en las políticas y marcos institucionales que se emprenden cuando el status-quo no genera bienestar ni desarrollo. Se refiere también a las políticas alternativas que se estiman que funcionarían mejor que el status- quo", explica.
En palabras del experto, "la principal pregunta de la 'economía política' de la reforma es por qué estas no se implementan. La respuesta rápida es la existencia de conflictos de intereses entre grupos sociales organizados, con una situación de predominio de los beneficiados por el status-quo".
"La segunda pregunta de la 'economía política' de la reforma es ¿por qué persisten los conflictos de intereses en medio de la reforma?, la tercera pregunta es ¿cómo algunos grupos logran contener/desvirtuar la reforma a pesar de la percepción de sus amplios beneficios?", añade.
Prosigue: "La cuarta pregunta de la 'economía política' de la reforma es ¿cuáles instituciones se necesitan modificar para poder alcanzar el grado de credibilidad necesaria en la reforma, de manera tal que sea factible 'negociar' la reforma entre diferentes grupos?".
En opinión del economista, "una discusión sobre la 'economía política' de la reforma económica en Cuba, con evidencia sobre intereses reales y apartando la liturgia doctrinal, permitiría entender qué se necesita para avanzar, pero no queda claro que la 'economía política' esté en la agenda del compendio".
El fin de semana, al referirse a lo que denominó "batalla económica", Miguel Díaz-Canel dijo que "Cuba tiene que resistir creativamente, sin renunciar al desarrollo, perfeccionando y actualizando los conceptos, y modernizando las maneras de hacer y de participar".
En palabras del gobernante, el resultado de "la batalla económica" está vinculado con "la mayor felicidad posible de las cubanas y los cubanos", pero siempre que sea "defendida desde las esencias del socialismo".
El "compendio" del VIII Congreso del Partido, según dijo Rogelio Polanco Fuentes, jefe del Departamento Ideológico del Comité Central del PCC, contiene ocho temáticas: "la continuidad, el papel del Partido y la unidad, la política de cuadros, la actividad ideológica, la democracia socialista, la economía, el bloqueo y la política exterior, y la defensa de la Patria Socialista".
El documento se "construyó con los conceptos e indicaciones del Informe Central" presentado por el general Raúl Castro, el discurso de clausura del actual primer secretario, y los documentos aprobados en las tres comisiones que sesionaron en el VIII Congreso.
Según las autoridades, parte también "de la actualización de los Lineamientos de la Política Económica y Social y la Conceptualización del Modelo, el Plan Nacional de Desarrollo Económico y Social hasta 2030 (PNDES) y la Estrategia Económico-Social acordada en julio de 2020".
No es tanto que los desgobernantes de Cuba sean comunistas sadistas, que lo son, es que todo lo que hizo quien-te-dije-en-jefe desde el principio de la revolución, y económicamente, digamos desde 1968 cuando acabó con los "timbiriches", fue para evitar que la historia se repitiese. Todo el mundo pobre, nadie podria pensar en alquilar una casita alejada en Guanabo, unos cuantos carros, tela para hacer uniformes igual que los de la policía y/o el ejército, etc, etc y atacar Villa Marista una noche de carnaval habanero. Y según dicen, dijo Stalin algo así como que "con el estómago vacío no se hace disidencia". Y el Canelo es "continuidad".