El régimen cubano prohíbe procesiones de Semana Santa en La Habana y Granma

El régimen cubano prohibió procesiones por la Semana Santa en La Habana y Manzanillo, una semana después de las protestas que estallaron en Santiago de Cuba y se extendieron a otros puntos del país.

La Parroquia del Sagrado Corazón de Jesús, ubicada en el Vedado, informó en un comunicado publicado en Facebook que el permiso solicitado para realizar la procesión por las calles de esa localidad habanera no sería concedido.

El párroco de dicha iglesia, fray Léster Rafael Zayas, señaló en el texto que recibió la negativa "a través de los canales pertinentes" y recordó que la procesión se había realizado durante más de 11 años. Solo se suspendió durante la pandemia de Covid-19 y el año pasado, cuando el argumento, según el sacerdote, fue la "falta de personal para garantizar la seguridad".

"En esta ocasión la negativa vino dada en relación a mi persona", explicó el sacerdote dominico. "Por lo visto mis homilías incomodan o ponen nerviosos a algunos".

En septiembre de 2023, en su homilía tras la peregrinación de la Virgen de la Caridad del Cobre por calles del Vedado, Fray Léster Rafael Zayas lanzó cuestionamientos relacionados con la crisis migratoria de Cuba y la desesperación por escapar de la miseria que ha llevado a residentes en la Isla a pelear en el bando ruso en la guerra de Ucrania.

"¿Qué hemos hecho mal para que los aviones que salen para Nicaragua salgan marcados todos con una misma característica: es un viaje solo de ida? Lo dicen las mochilas de los que viajan", afirmó entonces.

"¿Qué hemos hecho mal para que jóvenes cubanos prefieran irse a combatir a Ucrania, para conseguir la nacionalidad rusa?", fue otra de sus preguntas.

Este sacerdote fue también uno de los que presidieron una misa por el décimo aniversario de las muertes de los opositores Harold Cepero y Oswaldo Payá, de las que muchos responsabilizan al régimen cubano.

El homenaje a los dos opositores fue iniciativa de fray Léster Rafael Zayas y de los curas Jorge Luis Pérez Soto y Kenny Fernández.

Zayas también estuvo entre los religiosos que se pusieron al lado del pueblo cubano durante las protestas antigubernamentales de julio de 2021, conocidas como 11J.

Sobre la negativa de autorización para realizar la procesión, como presunta represalia contra su persona, el párroco apuntó que constituye una violación de la libertad religiosa del pueblo.

"La solicitud de la procesión no es una iniciativa del párroco, es fruto del deseo de la feligresía y por tanto del pueblo que quiere manifestar públicamente su fe, quiere llevar la religión que profesan a sus barrios, a sus calles, a sus casas, a su vida diaria, es por tanto un derecho soberano del Santo Pueblo Fiel de Dios", afirmó el sacerdote en el comunicado.

"Negarla como castigo a un párroco es además de absurdo, una violación de la libertad religiosa. El párroco es solo el portavoz del deseo del pueblo, es quien la solicita a la autoridad competente, pero no es un deseo personal suyo", acotó.

El religioso lamentó los sinsabores provocados en el pueblo por la negativa de autorización e informó que la procesión del Santo Entierro se realizará por los predios internos de la Parroquia el Viernes Santo a las 6:00PM.

En Granma, un sacerdote que prefirió mantener el anonimato confirmó al medio independiente 14ymedio los rumores de que no serían permitidas las procesiones de Semana Santa en la diócesis de Bayamo-Manzanillo.

"El Gobierno no quiere gente en la calle por miedo a posibles manifestaciones. Eso nos ha puesto en obligación de dejar de hacer algo que llevamos haciendo año tras año. El año pasado hubo procesiones y todo se hizo con la paz de Dios", dijo el religioso.

El sacerdote aclaró que no se han suspendido todos los actos religiosos, pero se realizarán en el interior de los templos. También recordó que las procesiones de Semana Santa son una tradición que se remonta al menos hasta 1952 y "se han realizado años sí años no, en dependencia de como ande el Gobierno". Las suspensiones en 2020 y 2021 se debieron a la pandemia de Covid-19.

Días antes de que este sacerdote confirmara a 14 y medio la prohibición de las procesiones en la diócesis de Bayamo-Manzanillo, el medio religioso Aciprensa había alertado de la intención del régimen de prohibirlas.

Una fuente local, cuya identidad no fue revelada por razones de seguridad, dijo al medio religioso que la medida parecía estar relacionada con el temor del régimen a que se desencadenaran nuevas protestas.

Bayamo fue uno de los territorios cubanos que se sumaron a las protestas que comenzaron el 17 de marzo en Santiago de Cuba. El Cobre y Santa Marta (Cárdenas) también fueron escenario de reclamos de corriente y comida, en medio de prolongados apagones de hasta 20 horas y una crónica escasez de alimentos.

El arzobispo de Santiago de Cuba pide comida, corriente y libertad para los cubanos

El arzobispo de Santiago de Cuba, monseñor Dionisio García Ibáñez, pidió comida, corriente y libertad para el pueblo en su oración del pasado 24 de marzo por el Domingo de Ramos, compartida en la página de Facebook del arzobispado.

Esos fueron los reclamos de los cubanos en las protestas que tuvieron lugar en la provincia, una semana antes.

"Queremos tratar de vivir una vida normal, en la que cada cual pueda hacer su proyecto de vida, que la vida no sea una lucha y un trabajo perenne", pidió el sacerdote, que recordó que la población tiene que emplear casi todo su tiempo en la búsqueda de lo básico para la subsistencia.

El religioso se refirió a la necesidad que tienen las personas de contar con energía eléctrica, en alusión a los largos apagones que agobian a la población de Cuba.

"Por eso nuestro pueblo ha dicho y repite, y eso todos lo sabemos: 'corriente y comida'. ¿Eso es inalcanzable, eso es pedir demasiado?", cuestionó el párroco y él mismo respondió a sus interrogantes: "No".

"Nuestro pueblo también pide la libertad. ¿Para qué? Pues para que cada cual pueda hacer su proyecto", afirmó.

El arzobispo recalcó que las personas quieren hacer sus proyectos de vida en Cuba, pero no ven la forma de llevarlos a cabo en su propio país. Recordó, además, que la población ha hecho sus reclamos sin violencia, en la mayoría de los casos.