La veterana líder opositora cubana Martha Beatriz Roque Cabello recibirá el 4 de marzo el Premio Internacional a las Mujeres de Coraje, que desde 2007 otorga el Departamento de Estado de Estados Unidos, informó el viernes un comunicado de la dependencia norteamericana en el que indicó además que en la ceremonia estarán presentes tanto el titular, Antony Blinken, como la primera dama, Jill Biden .
"Me siento ciertamente muy regocijada con este premio. Agradezco mucho a la Embajada de Estados Unidos en Cuba, que llevó a cabo la propuesta", dijo la activista cubana a The Associated Press en una entrevista realizada en la residencia de un funcionario de esa sede diplomática en la Isla.
"Al menos es una forma de decir 'has estado 35 años trabajando por la democracia de Cuba'", agregó Roque Cabello, de 78 años.
La opositora recordó que no podrá asistir a recibir el galardón, debido a que desde 2018 se encuentra "regulada", eufemismo que utiliza el régimen de la Isla para referirse a quienes prohíbe viajar al extranjero, razón por la cual no pueden tramitar su pasaporte.
Durante los últimos 35 años Martha Beatriz Roque Cabello protestó contra el régimen cubano y su modelo de partido único, e incluso hizo comentarios tan radicales de los que ahora se arrepiente. Las autoridades la acusaron de ser una agente de Estados Unidos y terminó encarcelada dos veces, pero nunca se marchó de la Isla.
Hoy lamenta que la emigración récord esté afectando también la articulación de una oposición y asegura que su legado como veterana disidente es precisamente la permanencia en el país.
Economista de profesión, trabajó para el Estado antes de una ruptura política que saltó a la luz pública en 1997, cuando junto a otros tres compatriotas —Félix Bonne, René Gómez Manzano y Vladimiro Roca— creó el Grupo de Trabajo de la Disidencia Interna y firmó una declaración titulada "La Patria es de todos", con reclamos de apertura política y económica.
El también llamado Grupo de los Cuatro terminó en un tribunal y Roque fue sentenciada a tres años y medio bajo cargos de atentar contra la seguridad del Estado y sedición. Fue liberada en mayo de 2000, pero continuó su activismo y conformó en octubre de 2002 la Asamblea para Promover la Sociedad Civil.
"Nosotros nunca pudimos llegar a tener una oposición en Cuba, porque las distintas organizaciones estaban muy fragmentadas y teníamos una penetración muy grande de la policía política… que trataba de destruirlas", aseguró Roque Cabello sobre aquellos años.
"Yo pienso que eso todo terminó el 11 de julio" de 2021, agregó, en alusión al estallido nacional, que para ella constituyó un parteaguas. "Fue algo impactante que el pueblo mismo, pero solo, sin necesidad de un líder, sin necesidad de una organización, saliera a la calle y provocara que temblara la dictadura", opinó.
Para la opositora "la situación, en estos momentos, es de verdad tétrica. El pueblo de Cuba no tiene comida, no tiene medicinas, no tiene transporte, no tiene agua, no tiene electricidad, todo es no tiene, no tiene, no tiene. Y la dictadura sigue ahí".
"La gente lo que busca es irse", expresó Roque Cabello. "La oposición actual no sufre prisión, se va para los Estados Unidos antes de que cualquier cosa suceda".
En marzo de 2003, Roque Cabello fue la única mujer arrestada de entre las 75 personas víctimas de una redada de opositores a los cuales Fidel Castro acusó de aceptar financiamiento del Gobierno de Estados Unidos, en la conocida como Primavera Negra.
Roque recibió una sentencia de 20 años de prisión en un juicio en el cual la testigo más fuerte en su contra fue su propia asistente, Aleida Godínez, quien se identificó entonces como una agente de seguridad del Estado. En julio de 2004 fue liberada —pero no exonerada— por problemas de salud.
La Unión Europea y organizaciones como Amnistía Internacional presionaron por la excarcelación de los 75 presos, quienes finalmente fueron liberados —los últimos en 2011— tras una negociación con la Iglesia católica y el Gobierno de España.
Desde su salida de prisión en 2004, se sumó a la organización de las Damas de Blanco, que ganó notoriedad demandando la excarcelación de los 75 presos.
"No soy la persona que fui hace 15 años o 20 años... Y la experiencia me haría no decir cosas que dije en el pasado. Pienso firmemente que la solución del pueblo de Cuba está aquí, dentro del país, igual que otros países han llegado a solucionar su problema dictatorial", señaló.
Más alejada de la vida pública, en la pasada década lideró la Red Cubana de Comunicadores Comunitarios opositores y actualmente lleva un recuento de presos mediante el Centro Cubano de Derechos Humanos.
"Nosotros, como parte de la vieja oposición, vamos a dejar algún ejemplo, porque no todo el mundo se fue, pero sí casi todo el mundo pasó por prisión. Un legado de trabajo constante, de deseo de democracia", finalizó.