El activista cubano Alejandro Garlobo, detenido desde hace cinco meses por el régimen, tuvo convulsiones en el Combinado del Este tras sufrir fiebre por varios días sin recibir una atención médica adecuada, alertó a Martí Noticias la opositora Diasniurka Salcedo.
Salcedo recibe con frecuencia llamadas de Garlobo desde prisión y alertó que el preso político padece estreñimiento severo y dificultades para orinar.
Garlobo, de 34 años, presentaba temperatura alta y un dolor agudo en los riñones en la prisión habanera de Combinado del Este, informó recientemente a DIARIO DE CUBA su esposa Isayris Díaz Díaz. El jueves, durante la visita conyugal, Díaz advirtió que la salud de su marido se había deteriorado.
"Este miércoles tuve pabellón conyugal con mi esposo y él llevaba una semana sin poder hacer sus necesidades fisiológicas, debido al dolor que tiene en los riñones. Cuando lo toqué, noté que tenía una fiebre altísima y hoy (jueves) me llamó y me dijo que seguía con fiebre. Las condiciones de la prisión son pésimas, no hay medicinas y la alimentación es muy mala. Ha bajado mucho de peso", explicó a este diario la esposa de Garlobo.
La esposa de este activista también se quejó del mal trabajo de las autoridades penitenciarias para organizar las visitas a la prisión.
Garlobo fue detenido el pasado 2 de marzo en su casa de Quivicán, Mayabeque. Primero estuvo bajo arresto en Villa Marista, el cuartel general de la Seguridad del Estado, y tras 40 días de malos tratos e interrogatorios, fue trasladado al Combinado del Este, en La Habana.
El activista todavía no tiene una fecha de juicio ni una petición fiscal. Hasta el momento solamente se sabe que está acusado por los cargos de "otros actos contra la Seguridad del Estado", una figura delictiva que podría costarle sentencias que van desde los dos hasta los 30 años de prisión, inclusive la pena de muerte.
Según un comunicado reciente de la organización independiente Justicia 11J, en este año hasta mediados de julio, al menos 20 cubanos han sido capturados o están en riesgo de ir a prisión por motivos políticos bajo el nuevo Código Penal.
Justicia 11J también indicó que la situación de salud de los reclusos se deteriora cada día debido a "las condiciones infrahumanas" de los centro penitenciarios, la falta de higiene y la escasez de agua, en prisiones como la de Canaleta, en Ciego de Ávila y Paso de Cuba, en Guantánamo. A ello se suma la mala alimentación, la necesidad de medicamentos y la proliferación de enfermedades como el dengue y plagas de chinches y cucarachas, alertó la organización.
Preso, enfermo y sin juicio. Solo en Cuba!!!!!