El preso político y sacerdote yoruba Loreto Hernández García fue trasladado "sorpresivamente" del Hospital Provincial Arnaldo Milian Castro, de Santa Clara, hacia la prisión de máximo rigor de Guamajal, según denunció a Amnistía Internacional en un audio el exprisionero político Jorge Luis García Pérez "Antúnez". Precisó además que el traslado ocurrió el pasado día 31 de julio y que Hernández se encontraba en la sala de penados de dicho hospital.
"Había permanecido allí por espacio de más de un mes. Su hija está lamentando, al igual que toda la familia, esta situación, que su padre haya regresado a la cárcel y no a su casa bajo la licencia extrapenal, como el propio criterio médico había determinado", explicó Antúnez, quien también es hermano del líder religioso.
De igual manera, Antúnez recordó que su hermano ha sido diagnosticado con una "severa" polineuropatía diabética y que "aún le persisten un grupo de problemas cardiovasculares, de hipertensión y asma crónica".
"Quiero recordar que durante ese mes de internamiento en el citado centro carcelario había sido sometido a un férreo aislamiento e incomunicación, el cual fue roto por los fuertes pronunciamientos de Amnistía Internacional y de las presiones del Directorio Democrático Cubano", apuntó el opositor.
La hija del líder religioso, Rosabel Sánchez, contó a DIARIO DE CUBA que este viernes iría "a la visita" a la prisión de Guamajal para tener noticias de él. A raíz de la denuncia realizada por "Antúnez", Amnistía Internacional consideró en un tuit que la situación de Hernández es "lamentable" y exigió "su liberación inmediata".
En junio, Amnistía Internacional declaró preso de conciencia a Loreto Hernández García, manifestante de las protestas antigubernamentales del 11 de julio de 2021 en la provincia de Villa Clara. La organización hizo también un llamado para una acción urgente a favor de la liberación "inmediata e incondicional" de los activistas y líderes religiosos presos.
"Entre quienes han sido condenados injustamente se hallan las personas activistas negras y líderes de la religión yoruba Loreto Hernández García y Donaida Pérez Paseiro, presas de conciencia, recluidas únicamente por sus convicciones políticas, que deben ser puestas en libertad de manera inmediata e incondicional", señaló una carta enviada por la organización al gobernante cubano Miguel Díaz-Canel.
La declaración de junio exigía al régimen cubano la liberación inmediata de Loreto Hernández García y su esposa, la activista Pérez Paseiro, también condenada por su participación en el 11J. Esta organización denunció que ambos fueron encarcelados tras un juicio injusto y carente de pruebas, donde fueron condenados en una sentencia en la que se hace referencia constantemente a la oposición política al régimen.
Amnistía Internacional alertaba entonces que la salud de Loreto Hernández García se había debilitado durante su estancia en la cárcel y pedía a las autoridades que tomaran "todas las medidas necesarias para proporcionarle atención médica independiente y adecuada".
En el audio compartido este jueves por Amnistía Internacional, "Antúnez" informó también que la salud de Pérez Paseiro, lideresa yoruba, se está deteriorando en prisión y que tiene "una preocupante situación", tras sufrir "unas crisis de hipotensión".
"Las autoridades deben tomar medidas urgentes para garantizar su bienestar y proceder con su liberación inmediata", reclamó la organización al compartir la denuncia realizada por el opositor cubano.
Loreto Hernández García fue condenado a siete años de prisión por su participación pacífica en las manifestaciones del 11J. Fue declarado culpable por los supuestos delitos de "desacato" y "desorden público".
