El prisionero político José Daniel Ferrer García deseó que el 2023 sea un año de "avance hacia la democracia, hacia la libertad y de retroceso para la dictadura y sus crímenes", según un mensaje difundido por su esposa Nelva Ismarays Ortega, en el canal de Youtube de la Unión Patriótica de Cuba (UNPACU).
La esposa de Ferrer pudo visitarlo por dos horas este lunes en la prisión de máxima seguridad de Mar Verde, en la que comprobó que el líder de la UNPACU se mantiene con "fuertes dolores de cabeza, también presenta dolores en la región de los riñones y en la columna debido a los golpes y patadas recibidas el pasado 9 de diciembre, cuando ni siquiera les importó que estuviera presente nuestro hijo Daniel José, de tan sólo tres años", dijo Ortega Tamayo en el vídeo.
Ortega Tamayo expresó, además, que su esposo siente esporádicamente ''sonidos ensordecedores, como de grillos, y también siente fuertes golpes en las puertas de la prisión en el horario de la noche, que le provocan insomnio''.
En otro vídeo disponible en Youtube, Ferrer hizo un llamado ''a todos los buenos cubanos de dentro y fuera de Cuba, para que no se olviden, y apoyen a hombres y mujeres que (...) están soportando con firmeza la crueldad de la prisión, (…) presos políticos que no son solo los del 11J, sino aquellos históricos, que también necesitan del apoyo de todos”.
Y ''a todos aquellos que dicen que José Daniel Ferrer se va de Cuba, quiero decir que José Daniel Ferrer no se rinde, no abandona a sus hermanos en desgracia, y prefiero mil años en prisión, incluso la muerte, antes que pactar con la dictadura'', advirtió.
Declarado prisionero de conciencia por Amnistía Internacional, Ferrer García fue detenido por las fuerzas represivas el 11 de julio de 2021, cuando intentaba sumarse a las manifestaciones antigubernamentales de ese día en Santiago de Cuba.