El juicio fijado para este lunes por las autoridades cubanas contra tres activistas que protestaron en Las Tunas en el mes de abril de 2021 fue suspendido por tercera vez sin dar ningún tipo de explicación a los acusados, quienes llevan diez meses en prisión, informó Radio Televisión Martí.
Se trata de los activistas Taimir García, Adrián Góngora y Damián Hechevarría, quienes protagonizaron una protesta contra inspectores estatales y las autoridades cubanas por la imposición una multa de una multa de 8.000 pesos a Hechevarría.
"Alrededor de las 8:30AM, hora para la que estaba señalado el juicio, nos acercamos al tribunal municipal para exigir una explicación. Nos atendió un señor que no se identificó y, de mala forma, nos informó que el juicio estaba cancelado. Le preguntamos el motivo y nos dijo, también agresivamente, que ellos no tienen que darnos explicaciones de lo que allí se disponía", dijo al medio de prensa Holmis Rivas Carmenate, esposo de la acusada García.
"Tenemos entendido que los tribunales son para impartir justicia, pero parece que eso no funciona igual para los opositores", añadió Rivas.
El incidente fue grabado y publicado en directa en Facebook por Góngora, quien se encuentra acusado de atentado, desobediencia y desacato, al igual que García y Hechevarría.
"Nos están matando de hambre y nos quieren quitar los cuatro kilos, partida de abusadores. Multan a una persona que se está muriendo de hambre, que se le está cayendo su casa a pedazos, que tiene enferma y muriéndose a su madre, por vender unas maticas", gritó García durante la protesta.
Luego de que Hechevarría rompiera la multa impuesta, llegaron miembros del Ministerio del Interior (MININT), entre ellos policías y otras personas vestidas de civil, que se llevaron a la fuerza a los tres opositores.
El incidente produjo apenas 20 días después de que el joven holguinero de 25 años Jorge Chacón Martínez se suicidara, agobiado por una multa de 7.000 pesos que le impuso la Policía.
Días después del arresto, el vocero del régimen Humberto López acusó a los activistas de ser delincuentes comunes y aseguró que serían juzgados por el delito de propagación de epidemias.
Aprovechando que el caso fue denunciado por el senador cubanoamericano por la Florida Marco Rubio, López calificó los hechos ocurridos como "show mediático amplificado por reconocidos personajes anticubanos".
El vocero añadió que la intención de los detenidos fue "crear un incidente mayor con el propósito de llamar la atención y hacerse de un aval contrarrevolucionario". Los describió como "tres delincuentes de una pésima conducta social", típica descripción de la prensa oficial de la Isla para cualquier cubano que expresa su oposición al régimen.
La Fiscalía Municipal de Las Tunas emitió sus conclusiones provisionales para el caso de los tres protagonistas de la protesta en esa provincia cuando llevaban siete meses encarcelados.