El periodista de DIARIO DE CUBA Osmel Ramírez ha roto el récord del régimen: lleva dos años bajo una medida de "regulación" que le impide salir del país, violando su libertad de movimiento.
"Son ya 735 días exactamente", especifica Ramírez. "De forma oficial, el argumento para esta medida es 'interés público'. Es un término donde caben muchas cosas, incluso los casos con que quiso justificar espuriamente el canciller Bruno Rodríguez a los 'regulados' en una entrevista reciente. Pero no es verdad, es contra el interés público y a favor de mantener el sistema totalitario del Partido Comunista. Por eso limitan de muchas maneras, abusando del poder despótico que tienen, de opositores, periodistas independientes y sociedad civil verdadera", consideró.
"Mi caso es por el periodismo independiente y mi activismo comunicacional en las redes. Me lo han dicho claramente cuando me han citado. Y me ofrecen restablecerme ese derecho humano si me convierto en colaborador de ellos, de la Seguridad del Estado. Yo me niego porque, como les digo, no negocio con mis derechos, peleo por ellos. Y ser agente infiltrado va contra mis principios y convicciones. Nunca haría ese trabajo para nadie", explicó.
Según Ramírez, ha conocido a opositores "regulados" por más tiempo incluso, pero no a periodistas independientes.
Henry Constantín, director de la revista La Hora de Cuba y vicepresidente regional para Cuba de la Comisión de Libertad de Prensa de la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP), estuvo casi un año con prohibición de salida.
"Yo tengo un perfil creo que mucho más bajo y solo podría explicar la severidad para impedir que viaje al exterior si diera crédito a informaciones internas de la Seguridad del Estado que me llegan y, por lógica, no son confiables, como que estoy en la lista de líderes jóvenes potenciales y temen que sea 'captado' en el exterior", reflexionó.
"Creo que tengo ese récord horrible, de ser el periodista independiente con varios días más de los dos años 'regulado'. No es un récord negativo mío, es negativo de ellos, porque yo lo que hago es legal y útil a la patria, y ellos violan mis derechos humanos, la propia Constitución y las leyes, y hacen daño al país poniendo coto a la promoción del cambio que Cuba necesita", opinó.
El periodista de DIARIO DE CUBA y Havana Times ha acudido a varias instancias en busca de una respuesta a su situación.
"Claro que me he quejado, es lo único que puedo hacer ante las irregularidades del MININT. Puse queja en la Fiscalía General de la República, junto a la queja por la incautación de mis medios de trabajo y de vida, incluso libros, mediante un registro a mi domicilio el mismo día a partir del cual fui preso tres días y quedé 'regulado'", recordó.
"La respuesta fue que 'por la naturaleza del delito no podían devolver nada, ni era esa la instancia para darme respuesta'. La respuesta fue leída y se negaron a dármela por escrito. Recientemente, al prolongarse [la 'regulación'], fui con una queja a la Oficina de Inmigración y Extranjería, pero no la quisieron recibir […] Lo que siento es que estoy tratando con sujetos fuera de la ley, que imponen su propia ley", declaró.
De acuerdo con el abogado independiente Julio Ferrer Tamayo, para estar sometido a una prohibicón de salida del país por razones de "interés público", Ramírez debe recibir una notificación al respecto de alguna entidad con potestad para ello.
"Si no te dan ninguna constancia, o notificación que indique que la prohibición es de 'interés público', es totalmente ilegal la prohibición", indicó Ferrer Tamayo a DIARIO DE CUBA. "Inmigración no tiene 'interés público', porque es un tramitador."
"Supongamos que es un periodista del diario Granma y el director del medio emitió una resolución al amparo de algún precepto legal que califica a la persona como 'interés público'. Eso se notifica y, al amparo de esa notificación, usted, como ciudadano, puede reclamar contra esa prohibición, amparada en la Ley de Inmigración", detalló el abogado.
"Nada de eso ocurre porque esas regulaciones son ilegales. Abusando del poder y del desconocimiento de los ciudadanos, te dicen que estás regulado y ya. El 'regulado' debe presentarse ante la Dirección de Inmigración, que tiene un departamento de atención a la población, y presentar una reclamación. Para que esta sea viable, debe estar redactada por un abogado que conozca la legislación para que tenga valor legal", aclaró.
Sin embargo, precisó Ferrer Tamayo, "ya actuando como actúan violan el artículo 52 de la Constitución, que garantiza el derecho al libre movimiento de los ciudadanos."
Entretanto, Osmel Ramírez sigue siendo impedido de salir de Cuba. "Dos veces he llegado al aeropuerto, la primera hace dos años y cinco meses, cuando viajé a España sin problemas. Al retornar, Inmigración y Extranjería me citó como si fuera la Policía, con amenaza de multa y demás si no me presentaba. Me hicieron preguntas estúpidas, como si fuera un terrorista entrando a un país ajeno", rememoró.
"Luego, cuando en los primeros días de octubre de ese mismo año 2017 intenté viajar a Lima, Perú, me lo impidieron en el propio Aeropuerto José Martí de La Habana. Ya tenía previsto viajar posteriormente a Colombia a un curso de superación profesional y tampoco pude".
"Como me he quejado a organismos internacionales de derechos humanos, como a la Comisión Interamericana de DDHH, no pude tampoco viajar a República Dominicana y dar mi testimonio, ni en otras oportunidades donde mi caso se discutió", señaló.
"Aquí te intimidan, te destruyen la capacidad económica, asustan a las personas que se relacionan contigo, mantienen a tus familiares en pánico por la constante amenaza de cárcel y de golpes. A mí me dijeron que si me metían preso, mis compañeros de celda me golpearían porque, según ellos, los reclusos son comunistas. Cosa que es mentira, no es fácil encontrar un comunista sincero en una prisión, lo que sí abunda es gente dispuesta a agredir a otros por prebendas", concluyó.