La Unión Patriótica de Cuba (UNPACU) denunció la situación que padece el activista Cristian Pérez Carmenate, que en estos momentos cumple prisión por el delito de "desobediencia" con una fractura en un brazo sin atención oportuna y que la organización atribuye a una golpiza recibida durante la detención del opositor.
Pérez Carmenate, de 45 años de edad, residente en Las Tunas, se sumó a la UNPACU hace dos años y es promotor de la iniciativa #CubaDecide. El 18 de julio de 2018 junto a los familiares de un preso político realizó una protesta pacífica frente a la Prisión Provincial de Las Tunas exigiendo el cese de la represión y su libertad, explicó a DIARIO DE CUBA Carlos Amel Oliva Torres.
Ese día "fue detenido y golpeado por la policía, y liberado luego de seis días sin ninguna acusación. Por este hecho, tres meses después, fue sancionado por desobediencia a un año y cuatro meses de trabajo forzado sin internamiento", contó Oliva.
Según el opositor, "pese a esta sanción Pérez continuó desarrollando su activismo y el 12 de agosto de 2019 fue detenido dos calles después de salir de su vivienda cuando se dirigía a realizar entrevistas a la población con su teléfono móvil sobre problemáticas sociales. Fue brutalmente golpeado y como resultado le fracturaron un brazo".
Oliva dijo que el arresto violento estuvo a cargo de los policías de la patrulla número 441 y el agente de la Seguridad del Estado que se hace llamar Reinier, alias "El Coco".
"Fue llevado a la 3ra unidad policial y ese mismo día sin recibir atención médica lo devolvieron a prisión", añadió.
Según el recuento de Oliva, pese a los lamentos de Pérez Carmenate, "pasó más de diez días sin la más mínima atención para su seria lesión".
El martes, después de 40 días fue llevado al Hospital Provincial de Las Tunas y le mantienen en la sala de penados.
"Allí un médico de militar para tratar de anular la responsabilidad de los oficiales del MININT relacionados en el caso le diagnosticó falsamente una fractura patológica, que indica que no fue ocasionada por ningún traumatismo, sino por una enfermedad que afecta el hueso, generalmente cáncer", precisó el activista de la UNPACU.
"Este es un caso muy lamentable donde la policía le ocasionó una fractura a un disidente pacífico aplicando una violencia injustificada y luego en prisión le negó la atención médica oportuna como represalia por sus ideas políticas. Cristian se encuentra en espera de que los médicos al servicio de la policía política decidan qué hacer con él. Ojalá y no sea demasiado tarde", condenó Oliva Torres.
El líder del Frente Juvenil compartió en su Facebook la imagen de la radiografía donde se muestran las condiciones en que se encuentra el brazo fracturado producto a la golpiza policial.
La UNPACU cuenta en estos momentos con 44 presos políticos, de ellos dos han sido reconocidos hasta ahora por Amnistía Internacional.
