El líder de la Unión Patriótica de Cuba (UNPACU), José Daniel Ferrer García, fue liberado este miércoles tras 12 días de arresto, confirmó él mismo al participar vía telefónica en una conferencia de prensa organizada por la Fundación Nacional Cubano-Americana (FNCA), con sede en Miami.
Aclaró que el régimen mantiene contra él el cargo de "asesinato en tentativa" de un oficial de la Seguridad del Estado. No obstante, la Fiscalía Provincial de Santiago de Cuba decidió un cambio de medida "de prisión provisional a libertad inmediata".
Ferrer García, miembro del Grupo de los 75, fue detenido el 3 de agosto y estuvo incomunicado desde entonces.
La Fiscalía de Santiago de Cuba lo acusó de impactar deliberadamente, con un auto que conducía sin licencia, al agente Dainier Suárez Pagán.
Testigos y el activista Ebert Hidalgo Cruz, que acompañaba a Ferrer García en el momento del incidente, aseguraron que fue Suárez Pagán quien se lanzó delante del auto y que, aunque intentó esquivarlo, el líder de la UNPACU lo golpeó levemente.
"Este individuo ha estado muy deseoso de verme tras las rejas durante muchísimo tiempo, porque la UNPACU, y yo personalmente, hemos puesto especial énfasis en denunciar hasta dónde (llegan) sus crímenes, hasta dónde (llegan) sus abusos", dijo Ferrer en la conferencia de prensa.
"Este individuo es uno de los sádicos más destacados que tiene el régimen a nivel nacional", afirmó. "Debería estar en una prisión por los múltiples crímenes que ha cometido contra muchísimos activistas".
El exprisionero político relató que, tras ser apresado, un oficial de la Seguridad del Estado lo amenazó diciéndole "ahora sí llegó tu fin".
Ferrer dijo que lo mantuvieron aislado en una celda "completamente cerrada, completamente sucia, en condiciones tremendas".
Añadió que, como forma de tortura, la policía política le negó durante cinco días los medicamentos que necesita para "serios problemas gástricos" que le producen dolor y otras molestias.
El líder de la UNPACU señaló que fue interrogado varias veces. "Querían que yo dijese que le lancé el auto encima a este esbirro y que asumiera las consecuencias" aseguró.
"Les dije: 'si nuestra lucha no fuera completamente pacífica, si fuera como la que desarrollaron Raúl Castro, Fidel Castro y quienes se adueñaron posteriormente del país, ya a ese hombre (Suárez Pagán) se le hubiese ejecutado por criminal'".
Ferrer añadió que mantuvo durante el interrogatorio su versión de que fue el oficial quien se lanzó delante del auto, mientras los agentes insistías en que "reconociera que quise matar a este esbirro".
Agradeció la solidaridad de activistas, exiliados y medios de comunicación. Sin esto, "hubiesen continuado torturándome allí con los medicamentos, con la alimentación, con los mosquitos", dijo.
"Hay una situación crítica con más de 100 presos políticos en Cuba (…) que son golpeados en las prisiones, que pasan hambre como si estuviesen en campos de concentración, que son agredidos y amenazados constantemente por peligrosos delincuentes comunes, que no les dan la debida asistencia médica, que toman agua que no es potable, que atenta contra su salud, que los maltratan de mil maneras, los humillan de mil formas", alertó Ferrer.
"Son quienes más sufren en esta compleja lucha por la libertad y la democracia para el pueblo de Cuba", agregó.
Al mismo tiempo en que se daba a conocer la liberación de Ferrer García, Martha Beatriz Roque, también exprisionera del Grupo de los 75, denunciaba desde la Isla el arresto en Villa Clara del líder opositor Jorge Luis García Pérez (Antúnez), quien fuera liberado horas depués.
A la conferencia de prensa asistieron exiliados y activistas como Rosa María Payá, líder del proyecto Cuba Decide; Luis Enrique Ferrer García, representante de la UNPACU en el exterior; Ramón Saúl Sánchez, del Movimiento Democracia; Silvia Iriondo, de Mar por Cuba; Blanca Reyes, de las Damas de Blanco; el poeta Raúl Rivero y otros miembros del Grupo de los 75, además de integrantes de la Brigada 2506.
"Está en marcha una oleada represiva contra el movimiento democrático cubano, contra la sociedad civil", advirtió Rosa María Payá refiriéndose a los arrestos de disidentes, activistas, periodistas, y a la represión de iniciativas independientes.
Más de diez disidentes han sido condenados desde que Raúl Castro designó a Miguel Díaz-Canel como presidente de los Consejos de Estado y de Ministros, resaltó.
"Hay una intención marcada por eliminar el trabajo democrático de la oposición cubana y como tal lo estamos denunciando", dijo.