El equipo que conquistó el título en la recién finalizada Copa del Caribe —primero para el béisbol de Cuba en casi diez años— regresa a la Isla con dos peloteros menos.
El jardinero Osday Silva, líder en jonrones de la última Serie Nacional de Béisbol de Cuba, dejó la selección en la madrugada de este lunes, informó el periodista deportivo Francys Romero en la plataforma X (antes Twitter).
El santiaguero conectó 18 cuadrangulares en el campeonato doméstico cubano y bateó para .336, además de impulsar 80 anotaciones.
Su desempeño en el torneo lo hizo merecedor del Premio MVP Martín Dihigo. Al separarse del equipo que jugaba en Puerto Rico, Silva se sumó al pitcher Franky Quintana, quien el jueves abandonó la delegación.
Además de Silva y Quintana, otros peloteros que han abandonado delegaciones en 2023 son Ivan Prieto —primero en la historia de los Clásicos Mundiales de Béisbol—, Yobanis Millan, Glenda Camila Dunet, Yusvani Bonne, Yoannet Domínguez y Talia Vélazquez. Estas últimas integraban el equipo que intervino en la Copa Mundial de Béisbol Femenino.
Además, el pitcher Yariel Rodríguez no viajó a Japón para cumplir el contrato establecido con los Dragones de Chunichi a través de la estatal Federación Cubana de Béisbol.
Yunior Ibarra no regresó a la Isla al finalizar sus contratos en Canadá. Pedro Pablo Revilla, quien también estaba contratado por Chunichi, salió de Japón cuando a la temporada le quedaban aún diez partidos.
Estos tres casos demuestran que las contrataciones en ligas profesionales foráneas —aprobadas en 2013 y establecidas a través de entidades estatales— no bastan para mantener a los atletas vinculados al sistema deportivo cubano.
Además de ser el segundo pelotero que se separó el equipo que asistió a la Copa del Caribe, Silva se convirtió en el deportista o técnico cubano número 52 que abandona una delegación en el extranjero o un contrato, o decide no retornar al finalizarlo, en lo que va de año.
A finales de septiembre, la prensa oficial cubana reconoció hace poco la ocurrencia de nueve fugas en 15 días y aseguró que a esos deportistas le faltaban valores. "Al entrenamiento propiamente de los músculos para ganar medallas le han salido agujeros de formación educacional y de valores, propios de todas las crisis económicas e ideológicas", escribió Joel García, periodista del semanario Trabajadores.
Las 52 fugas que se han producido hasta la fecha en el deporte cubano no incluyen a los atletas y técnicos que han optado por la emigración regular o irregular para buscarse un futuro en otro país.
De cara a la participación en los venideros Juegos Panamericanos de Santiago de Chile, autoridades deportivas cubanas reconocieron que 78 atletas han roto relaciones en 2023 con el Instituto Nacional de Deporte, Educación Física y Recreación (INDER).