El pívot cubano Ysmael Romero no pudo viajar a La Habana con el equipo de Puerto Rico para el enfrentamiento con la escuadra local correspondiente a la segunda ventana clasificatoria a la Copa del Mundo de Baloncesto FIBA 2023 porque las autoridades de la Isla no le entregaron su pasaporte cubano a tiempo.
"Lamentamos mucho la situación. A pesar de todos los esfuerzos que hicimos en la Federación de Baloncesto de Puerto Rico para gestionarle el pasaporte cubano, finalmente no llegó a tiempo, por lo que no podrá viajar con el equipo a Cuba", dijo el viernes Yum Ramos, presidente del organismo local, en un comunicado publicado en el sitio oficial de la entidad deportiva.
Ramos señaló que Romero realizó las gestiones pertinentes desde el año pasado. Asimismo, la Federación boricua envió una comunicación a la Federación de Cuba y a la Embajada y consulado cubano en Washington D.C.
Pese a todo, las gestiones fueron infructuosas.
La situación de Romero es extraña, puesto que a pesar de que abandonó en junio de 2012 la selección de Cuba en Puerto Rico junto a otros cuatro atletas, ya cumplió los ocho años de sanción sin entrar a la Isla que impone el régimen a quienes abandonan delegaciones oficiales.
De hecho, el baloncestista regresó en diciembre de 2020 a Cuba y estuvo un mes junto a sus familiares allí.
"Mis amores. Mis reinas, la vida me ha mostrado lo grande que ellas son para mí, hoy puedo abrazarlas y sentir que todo está bien y ¡estará bien! Valió la pena todo, son tan bellas, son tan tiernas, son tan mías que solo puedo agradecer por tenerlas y poder disfrutarlas luego de ocho años", escribió Romero en Instagram tras reencontrarse con su hija y madre, a quienes no veía en casi una década.
"Realmente han sido años bien duros. Me he perdido la crianza inicial de mi hija. Eso me ha dolido bastante. No haber estado ese primer día de escuela. Esos primeros días de ella hablando. Yo la dejé cuando tenía apenas un añito y medio", declaró Romero en esa ocasión.
Asimismo, tras nacionalizarse y jugar en Puerto Rico, en octubre de 2021 fue autorizado por la Federación Internacional (FIBA) para representar a esa isla caribeña en torneos internacionales.
El enfrentamiento en La Habana con el equipo cubano es decisivo, puesto que Puerto Rico cayó el jueves ante Estados Unidos con marcador de 93-76. En ese desafío, Romero encestó cinco puntos y atrapó seis rebotes.
Por su lado, el propio jueves el equipo cubano encajó su tercer revés en el grupo clasificatorio al Mundial, cuando cedió ante la representación de México con pizarra de 72-82.
Los cubanos buscan ahora su desquite ante los boricuas, que los vencieron ya en noviembre en un partido en el que, curiosamente, Romero fue el mejor por Puerto Rico, al lograr 18 puntos y ocho rebotes.