Los atletas de la lucha libre Alejandro Valdés (65 kg), Geandry Garzón (74 kg) y Reinieri Salas (97 kg) completaron la docena de plazas de esta disciplina conseguidas por la Isla rumbo a los Juegos Olímpicos de Tokio 2020, informó el sitio digital Cubadebate.
El primer boleto para los luchadores cubanos en el preolímpico de Ottawa, lo ganó Alejandro Valdés, impresionante con dos éxitos por superioridad técnica y sin permitir puntos en su contra. Valdés aseguró su presencia en Tokio al vencer en semifinales al canadiense Dillon Emmanuel Williams.
Mientras, el veterano Geandry Garzón, con 36 años, aseguraba otra vez su presencia en un torneo olímpico al derrotar 12-8 al venezolano Anthony José Montero, subcampeón olímpico de la juventud en 2014. La apertura del cubano tampoco fue tan sencilla, pero se las arregló para superar 6-2 al argentino Jorge Iván Llano.
Garzón sorprendió con la clasificación, pues llevaba varias temporadas alejado de los colchones. El mejor resultado de Garzón fue un quinto puesto en los Olímpicos de Beijing 2008, hace doce años.
Finalmente, el mundialista Reinieri Salas derrotó por superioridad al puertorriqueño Evan Ramos y se agenció el tercer cupo de la fecha para la delegación cubana. El resultado asegura al cubano en sus terceros Juegos Olímpicos, luego de su debut en Beijing 2008 y su quinto lugar en Río de Janeiro 2016. En total, saltaron al colchón seis libristas, pero solo consiguieron el cupo estos tres
A falta del preolímpico mundial, la lucha cubana tiene aseguradas doce plazas para Tokio 2020, divididas en seis en la grecorromana, tres de la modalidad libre y otros tres cupos en la lucha femenina.
Hace cuatro años, en Río 2016, los luchadores cubanos consiguieron dos medallas de oro, a través de Ismael Borrero y Mijaín López, y una de plata mediante Yasmany Lugo.
