Kierkegaard robot nunca con novia
gran cola en la cara bebiendo cerveza
no me animo a publicar
hay que reescribir la historia
con pocos detalles
aún así
el libro se escribe
cuando lo tienes en la mano
vacía como una cantimplora
la originalidad de un hombre está
en lo que oculta
y dibujó cada hoja de macadamia
para recaudar dinero
usó los cantos como guía de Venecia
he sido el recipiente incondicional
de mocos y lágrimas
quiero cenar garbanzos
la locura consume
abrazarte a la llama del pote de helado
las lecturas son referentes locales
solo lo real perdura
conducir debe ser fácil
es un momento incómodo
sol
tres palmas reales
dos gallos finos
el final se quedó
porque llegué
corazón es una palabra prohibida
en este culto
en esta cima
la guerra lo absorbe todo.
No sé dónde posar mi tempestad.
Elvira Castillo nació en Sagua de Tánamo, Holguín, en 1963. Ha publicado el poemario Tránsito (Letras Cubanas, La Habana, 2004). Este poema pertenece a un libro inédito.
