Jugábamos pesado en la cama. Las almohadas sucias, el edredón
manchado. La esperma de una vela ardía delante del
retrato de un hijo. Un auto largo y ancho, de otra época.
Una playa. El rumor de las olas entraba por la puerta y
los diálogos de una película de relajo que no mirábamos
pero que tampoco dejábamos de mirar. Un plato de habas
blancas de alguna despensa humeaba. Muslos de pollo
y los muslos de un negro contador afeitados, debajo de una bata
color menta. Había ajo en su aliento. Flores de cera en un búcaro
de vidrio. Exigías de estos hombres, y de otros recostados a
la lavadora de platos, fidelidad total. Vasos abandonados
sobre el tocadiscos, encima del vano. El oscuro placer de quienes
ocultan su fracaso en una coterie demasiado burlesca para
ser tomada en serio. Estos hombres de barrio que tú llamabas girlfriends.
Teatro mínimo y salida al balcón. Mareado por la brisa del aire
acondicionado, aspiré el aire puro. Toda esta inocencia sería
calcinada dentro de poco. Todo juego cobarde, expuesto. Abríamos
heridas en los otros con los puños, metíamos la mano en el hueco
buscando el fin del arte, la fruición suprema de una época sin estilo.
Cada cual llevaba escrita su condena en la gomina seca, en la raya
torcida de un pantalón. No hay signos habituales. No hay cuadros de
Bronzino que expresen la difteria, ni Verrocchios a la entrada de la nueva
pestilencia. La plaga es más sutil que cualquier mármol. El Vaticano
conmemora una variante antigua de nosotros. Pero se nos olvida.
Arrojé el cigarro a la calle desde el trigésimo piso. Cuando cayó
al asfalto, las yescas se arrastraron delante de los autos como
pidiendo perdón...
Néstor Díaz de Villegas nació en Cumanayagua, en 1956. Sus últimos libros de poemas publicados son Che en Miami (Aduana Vieja, Valencia, 2012), Palavras à tribo/Palabras a la tribu (Lumme Editor, Sao Paulo, 2014). Ha reunido su poesía en Buscar la lengua. Poesía reunida 1975-2015 (Bokeh, Leiden, 2015). Vintage Español publicará próximamente su libro De donde son los gusanos. Crónica de un regreso a Cuba después de 37 años de exilio. Este poema pertenece al libro en preparación Red Rum.