a Pepe Triana
Si la luz es el agua que ahora te mece
la camisa constante
diáfana y franca como tu mirada
casi indistinguible de tu piel
o el destello de piedras preciosas que siguieron tu cortejo
el sueño de tus manos al despuntar el alba
acariciando paciente una memoria lejana
o la almohada peluda de la mascota fiel.
Quién se atreve a negar que fuiste orfebre
un amigo tenaz, un pastor de leones
un coloso sencillo de signos cotidianos
(tu desayuno repleto de salmos y poesía)
levitando risueño sobre cualquier andén.
Quién cuestiona esta tarde
tu espléndida agonía
cuando entrabas ufano en el bosque más profundo
para descubrir en la noche
la melaza de Hatuey.
Iraida Iturralde nació en La Habana en 1954. Sus libros de poemas más recientes son Discurso de las infantas y La isla rota (Verbum, Madrid, 2002). Dirigió las revistas Romanica y Lyra. Este poema pertenece a un libro en preparación.