Apreciaré que me acompañes
a Emergencias, bicitaxi Padezco
un efecto paradójico, ya que preguntas
La línea que se logra ver de la bahía
se convierte por momentos en tu espina
dorsal Háblame de dinero, respondes
de distancias nunca
Pasan puntas de flechas, ángulos
de personas en estado latente, tiendas
y teatros convertidos en parqueos para ti
bicitaxi, todo en sombra La basura
acumulada en las esquinas durará
por siempre como la nacionalidad Ya no
somos muchachos, no te asombres
Dependemos de padres, jefes indios
e instituciones en general benéficas
Tuve como tú en la actualidad los costillares
nítidos, un tendón bien dibujado tensaba
el maxilar con borde de cuchillo, como tú
Nací cuando la patria decían se convierte
en amenaza para la paz del mundo Había
personas en la colina del hotel Nacional
que engrasaban armas antiaéreas Algo
de aquellas energías pesaban
en los brazos ayer noche Apreciaré
que derramases algo de epidérmica atención
cuando llegue el descorazonamiento Al dulce
oficial de la carpeta diré somos primos
hermanos o algo así.
Sigfredo Ariel nació en Santa Clara, en 1962. Sus libros más recientes son la antología de poemas Ahora mismo un puente (Efory Atocha, Madrid, 2012) y el poemario Recreos para la burocracia (Unión, La Habana, 2015). Este poema pertenece al libro inédito Todos los hierros.