'Pablo Milanés era tan humilde que me impresionaba', dice su exyerno y colega Roberto Perdomo

Roberto Perdomo, director de la banda Tesis de Menta, conocida por temas como "Bolero Blues", "Ángel y soledad" y "Soltando amarras", hace tres años llegó a EEUU y ahora trabaja en la etapa final de su octavo disco, Existir. "Ya en Cuba sentí que no podía hacer más y me hacía mucho daño ver a mi patria así. La canción 'Alas de espuma' nace por lo que sucedió el 11J. No puedo callar ante estas cosas. Decidí emigrar y todo lo que eso implica, empezar una vida nueva", dice en entrevista con DIARIO DE CUBA.

Perdomo nació en San Antonio de los Baños, "un pueblo que se caracteriza por su cultura. Yo soy de una familia de campo, un guajirito. En mi casa se escuchaba de todo, un ajiaco musical. Por la parte de mi tío abuelo llegaba el tango, las letras de tangos son como guiones de películas (…), mi abuela cocinaba escuchando Radio Enciclopedia. Hoy me doy cuenta de que eso se quedó en mi subconsciente a la hora de crear".

La familia Milanés jugó un papel fundamental en la vida profesional y personal de Perdomo, quien admiró la música de Pablo Milanés desde niño y años más tarde, como si la vida lo escuchara, formó parte de su entorno más cercano. "En mi época todos querían tocar una guitarra y ser como Pablo o Silvio", dice. Sin embargo, fue el rock el género que hizo vibrar al artista. 

"En mi adolescencia, un vecino de la finca de al lado fue a estudiar a Rusia y cuando regresó trajo un tocadiscos y discos de rock. Cuando escuché aquello, se me abrió una puerta, el rock es muy libre. Me adentré en ese mundo de inmediato".

Pablo Milanés entra en la vida de Perdomo en un Festival de las Artes en Cuba, cuando la banda estaba saliendo de la censura. "Nos pusieron a tocar bajo un sol infernal, a otros grupos les tocó la noche, no había casi ni público, y ahí estaba Pablo, con una sombrilla, aquello me impresionó mucho".

Después de la presentación, Milanés le propuso que colaboraran, ese mismo día conoció personalmente a Suylén Milanés, con la que estuvo casado durante diez años. "A pesar de que fui parte de su familia, siempre le tuve mucho respeto, lo recuerdo como un gran patriarca, un hombre muy amado por sus hijas y sus amigos".

Según Perdomo, Pablo Milanés tenía muchas facetas, "era el Pablo culto, campechano, un cubano acérrimo, infinitamente humano, era tan humilde que me impresionaba; ahí radicaba su mayor grandeza, con él aprendí muchas cosas. Le debo mucho a esa familia, a sus hijas, a Nancy, su viuda. Era un hombre cósmico".

Perdomo chocó de frente contra la censura en Cuba por "Mi generación", una canción dedicada a los amigos que perdió en el mar. "Pavel Giroud le hizo un video a ese tema y lo que nos vino para arriba fue un tren de hierro. Me costó tres años de censura, no podía tocar en ningún lado. Me acuerdo de que llegué a un programa de televisión que ya estaba preparado, y llegó un personaje y me dijo que no podía grabar. Ya con los años se va perdiendo la inocencia".

Para Perdomo, estamos viviendo una degradación mundial de la música. "Hay una élite que manipula eso, la mala música mueve las bajas vibraciones y todo lo que sea elevador para la conciencia le cortan el grifo. La culpa no es de Bad Bunny, es de los que promueven a Bad Bunny y le han creer a los muchachos del mundo que lo mejor es Bad Bunny".

"En Cuba hay muchas personas talentosas en provincia que no tienen el dinero para grabarse una maqueta y no pueden llegar a los medios", lamenta el músico.