Yosmany Larrea es un cubano asentado en Italia que brilla en varias manifestaciones artísticas: tiene su propia colección de moda, canta ópera y le ha puesto voz en italiano a personajes míticos de Walt Disney. El diseñador salió de la Isla para buscar su espacio de expresión. "La moda en Cuba se quedó a inicios de los años 50, desde esa época desapareció. Tenemos algunos diseñadores que intentan rescatar lo que ya está en desuso, pero eso no representa a las nuevas generaciones", dijo en entrevista con DIARIO DE CUBA.
"Conozco el ISDI (Instituto Superior de Diseño Industrial), pero no concordaba con el punto de vista que tienen a lo que es para mí la moda. No me interesó hacer diseños de moda en Cuba, aunque siempre estuve en contacto con este mundo a través del teatro y las pasarelas".
La suerte cambió para Larrea en Shanghái, a donde fue enviado por su agencia a un desfile de moda de un diseñador italiano. "El diseñador se había retrasado y tomé la iniciativa de organizarle la colección en el showroom. Cuando llegó, se sorprendió y me preguntó '¿Tú me quieres quitar el trabajo?'. Después entablamos una relación muy bonita y me dio muchas oportunidades porque vio mis capacidades".
Larrea estudió en el icónico Instituto Marangoni en Italia. "Pasé el examen de admisión, pero una vez a dentro fue caótico a veces. Me ponía a rebatirle a los profesores. Yo no venía de cero, tenía una base sin saberlo", dice el diseñador, quien opina que la práctica es la que te forma, "cuando entras en el fuego".
Luego de terminar el instituto, Larrea se encontró con la oportunidad de crear un estudio con su descubridor de Shanghái, en donde tiene una línea más comercial y otra más seria. "Ahí fue cuando choqué con las fábricas, el lujo y las grandes marcas. El trabajo que más me ha retado fue la primera colección que hice para Ralph Lauren".
Los diseños de Larrea impulsan una homogeneidad cultural que el artista atribuye a su formación. Su abuela y su madre le hacían leer libros de la cultura de Grecia, China, Japón, entre otras.
"En mis diseños no reflejo solo al cubano que muchos quieren representar, que es el del tabaco, el del bolero o la religión yoruba. El cubano tiene otras aristas más allá de eso. Nosotros impulsamos en nuestro estudio esa internacionalidad cultural".
Las dificultades más importantes que se ha encontrado Larrea en la industria de la moda es su edad y sus ideas, que muchas veces son extremadamente costosas.
"Muchos no me han tomado en serio porque me ven joven e inexperto; paradójicamente, las personas que me han escuchado y brindado un espacio, son pilares en la industria de la moda. Otra dificultad es que muchas de las cosas que yo quiero hacer requieren una inversión enorme porque nunca hago nada fácil. Yo me voy por la parte más complicada siempre. Necesito retarme".
Si Larrea tuviera que elegir una personalidad para diseñarle un vestuario sería a la cantante de ópera María Callas, artista que, como él, disfrutaba del buen vestir y de una voz prodigiosa.
Que Dios le siga ayudando y que desarrolle aún más su talento, que triunfe en sus 2 mundos.