El doctor en Medicina Legal Jorge González Pérez, quien dirigió la búsqueda de los restos del argentino Ernesto Guevara en Bolivia, falleció en Cuba este martes, informó el portal oficial Cubadebate, citando una publicación en redes sociales del ministro de Salud Pública, José Ángel Portal Miranda.
González Pérez fue miembro fundador de la Sociedad Cubana de Medicina Legal, que presidió desde 1990 hasta 2017, y diputado a la Asamblea Nacional del Poder Popular (ANPP) de Cuba, desde 1998 hasta 2003.
Fue reelecto para el periodo 2003-2008, durante el cual ocupó el cargo de presidente de la Comisión de Salud y Deportes del Parlamento, además de presidir el Grupo de Amistad Parlamentario con Bolivia en ambos periodos.
Le fue ratificada la condición de diputado el 18 de abril de 2018, en la sesión constitutiva de la IX Legislatura, celebrada en el Palacio de Convenciones de La Habana.
En 1995, González Pérez recibió del Gobierno cubano la misión de encontrar los restos de Ernesto (Che) Guevara y sus compañeros, muertos en 1967 en Bolivia.
La búsqueda concluyó, con el presunto hallazgo de los restos, en 1997. Los supuestos huesos del guerrillero comunista, así como los de sus compañeros, fueron trasladados a Cuba. El hallazgo, oportuno por coincidir con el aniversario número 30 de la muerte del Che, fue cuestionado. Aún hoy existen dudas sobre su veracidad.
Miguel Díaz-Canel, al lamentar en redes sociales el fallecimiento del doctor, lo describió como "un científico brillante, apasionado y leal hasta el último aliento".
"Duele mucho la pérdida de un científico brillante, apasionado y leal hasta el último aliento, como Jorge González, Popi para todos los cubanos, Héroe del Trabajo y admirado directivo de la Salud, a quien debemos, entre muchos aportes, el hallazgo de los restos del Che", escribió el gobernante cubano en un mensaje publicado en la red social X y citado por la agencia estatal Prensa Latina.
Que en paz descanse:
De todas formas los comunistas tienen esa tendencia al culto funerario, La momia de Lenin, las manos del asesino congénito, la momia de Ho-Chi-Minh. El Seboruco de Castro I de Biran.
Es cierto,el cráneo de los despojos del "guerrillero" hediondo " tenía una raída boina apestosa y semidescompuesta,además de multliples organismos devoradores de cadáveres emponzoñados por el veneno del susodicho...
¡Para el Seboruco con el compañerito!
No hay que gastar dinero en pruebas de ADN.
Cuando Labana caiga, algún día será; exhumación, cremación y al basurero ...
Dios mío, están cayendo mis compañeros de curso. “Popi” hizo Medicina Legal, para sorpresa de nosotros. Se hizo un gran especialista; pero se comprometió demasiado con el gobierno. Yo lo conocí bien y lo recuerdo como buena persona. Dios lo tenga en su gloria.
Papa—- Ya se sabe que te codeaste con toda la ralea comuñanga de tu época, pero eso no es ningún mérito, al contrario, revela tu naturaleza.
(El „pecado original“, u know. )
Todo lo del régimen relacionado con los restos de Che es una mescolanza de propaganda con falta de transparencia. Desde las manos aquellas que Fidel Castro anunció en un discurso en la Plaza, y que recordaban la película de Peter Lorre The Beast With Five Fingers, por lo "creepy" del asunto, hasta ¡oh, milagro! los restos que se encontraron justo en el 30 Aniversario de la muerte de Che y los otros guerrilleros, ni un año antes ni otro después. De las manos más nunca se volvió a hablar. No se sabe si fueron a parar junto a los huesos, o si están guardadas en un cristal como los zapaticos de rosa en alguna bóveda del Palacio de la Revolución. Lo cierto es que, por fortuna para los cubanos con sus psiquis ya afectadas, alguien en pleno uso de sus facultades mentales convenció a Fidel Castro de que ese plan de exhibirlas en un museo era una muy mala idea.
Dª Ana, me ha recordado una de las películas que aterrorizó mi tierna infancia, esas manos tocando el piano, pánico me dio.
A lo mejor fifo quería mostrar las manos al público y ponerlas a la altura del brazo incorrupto de Sta. Teresa de Jesús, que en medio de los avatares de la Guerra Civil Española terminó adornando la mesilla de noche del dictador Franco. Confieso que soy católica pero ese empeño de la iglesia de mostrar cuerpos y miembros incorruptos nunca me ha gustado, lo encuentro de bastante mal gusto, imagínese ver las manos de un asesino.
Un saludo.
Evidentemente vimos la misma película, Pim-Pam-Pum, y a las dos nos causó el mismo miedo. Le juro que cuando Fidel Castro dijo aquello enseguida pensé en las manitos tocando el piano, y pensé si estaba loco.
Recuerde que Mr Castro pasó por internados católicos hasta que fue a la universidad. En su verborrea hay muchísimo de esa formación. Saludos