Las víctimas mortales de la violencia machista en Cuba en 2023 ascendieron a 86, con la verificación de dos nuevos feminicidios por activistas de la sociedad civil independiente. El Observatorio de Género de la revista feminista Alas Tensas (OGAT) en colaboración con la plataforma Yo Sí Te Creo en Cuba, verificó esta semana cinco nuevos crímenes de violencia machista en la Isla.
El más reciente de los feminicidios verificados por los observatorios fue el de Misleidis Diaz, de 46 años de edad, quien fue asesinada este 19 de diciembre a manos de su expareja y padre de sus cuatro hijos en plena vía pública, en el poblado de Herradura, Consolación del Sur, Pinar del Río, y dado a conocer en un reporte de OGAT este viernes.
"Misleidis había denunciado a su agresor en la Policía sin recibir el debido proceso. Las autoridades son también culpables de su feminicidio y el desamparo de sus descendientes, de los cuales dos son menores de edad y uno requiere de cuidados al vivir con discapacidad intelectual y motora", denunció el OGAT en un comunicado.
La nota agrega que, también el 19 de diciembre, la maestra cubana Lisday Castañeda Balladares, de 26 años de edad, en Trinidad, Sancti Spíritus, fue víctima de un crimen de violencia machista a manos de su expareja. La víctima tenía dos hijas.
OGAT y Yo Sí Te Creo en Cuba confirmaron el pasado 19 de diciembre los feminicidios de Mayelín Rodríguez, Melani García Lorenzo (de apenas 16 años) y Yailén Matamoros Sánchez. Los tres hechos ocurrieron entre el 11 y el 16 de diciembre, y los autores fueron las parejas o exparejas de las víctimas.
Ante esta realidad, varios grupos de la sociedad civil independiente cubana se han unido en la redacción y publicación de una Carta abierta "contra la impunidad de la violencia feminicida y por la transparencia" dirigida a las autoridades cubanas. "Ni hacen ni dejan que la ciudadanía se organice legalmente para hacerle frente a la violencia feminicida", apuntan en su misiva.
"Las activistas de derechos humanos en Cuba, las mujeres, las feministas, hemos trabajado duro en sacar a la luz las expresiones de la violencia feminicida, que se resistía a contar el régimen cubano", agrega el documento.
La carta fue firmada por la Alianza Cubana Por la Inclusión, la Confederación Obrera Nacional Independiente de Cuba, la Federación Latinoamericana de Mujeres Rurales (FLAMUR), el grupo Mujeres Democristianas, la Red de Líderes y Lideresas Cubanas, el Museo Virtual de la Memoria contra la Violencia Basada en Género (VBG), la Red Femenina de Cuba y los observatorios de la plataforma Yo sí te Creo en Cuba y de Alas Tensas.
"Las autoridades han admitido, una vez más públicamente, la existencia de 'femicidios' (y no de los feminicidios) y de la violencia de género en el país, lo que conocimos por un inexacto reporte de Granma, sobre el VII Pleno del Comité Central del Partido Comunista de Cuba, que deja más preguntas que información sobre la situación actual de la violencia de género en Cuba. La primera vez fue en un informe internacional fechado en 2019, con datos de 2016", señalan los firmantes.
En la carta advierten además que, a partir de dicho texto publicado por el diario oficialista Granma, surgen varias preguntas que deben responder las autoridades: "¿Qué metodología han empleado las instituciones para establecer el 'número de familias que viven en situaciones de violencia' y otros datos que saldrían de esta investigación, como incidencia por color de la piel? ¿Cómo se tipifican las 'muertes violentas de mujeres', de dónde surge el número expuesto de 117 y a qué periodo de tiempo se refiere?¿Por qué usar categorías racistas en las metodologías que fueren?".
De manera clara y explícita los firmantes de la carta cuestionan: "¿por qué han sido tan reticentes en poner en marcha una Ley Integral contra la Violencia de Género, si conocían y tenían cuantificado el problema, aun con los sesgos que identificamos en su falta de transparencia metodológica? ¿Por qué han permitido el coste en vidas que deja atrás secuelas personales y familiares muy difíciles de superar? ¿Por qué no implementan medidas efectivas de prevención como comisarías especializadas, fiscalías de género, refugios, protocolos integrales y sus programas antirracistas?¿Por qué insisten en nombrar femicidios a los feminicidios, si su actuación ha sido cómplice?".
"Sabemos que la respuesta a estas preguntas están en su naturaleza patriarcal y machista, además de autoritaria contra las libertades fundamentales", apunta la carta.
Para los firmantes del documento no se puede abrir una nueva etapa para Cuba "de supuesto enfrentamiento a la violencia machista", y mantener "la criminalización de todo el activismo cívico" en el país, incluyendo el activismo feminista. "No es posible pasar a la acción, si una parte del activismo político y feminista cubano ha sido forzado al exilio, sobre todo desde 2021 hasta el presente", indican.
Por otro lado también aseguran que no es posible "enfrentar la violencia de género" si no se reconoce "la violencia política con sesgo de género, que ejercen las autoridades cubanas y afecta sobre todo a las más de 100 mujeres" presas políticas.
Como ejemplo, en la carta se menciona el caso de la presa política del 11J Lizandra Góngora, "recluida a 160 kilómetros de distancia de su hogar, y separada injustamente de sus cinco niños". También se recuerda, entre otros, a Brenda Díaz, una mujer trans a la que las autoridades mantienen recluida en una prisión de hombres. Otros casos enumerados fueron los de las arbitrarias sanciones que acumula Aymara Nieto, una Dama de Blanco que se encuentra detenida desde 2018 y que ha sido juzgada recientemente por otro delito, el de liderar un supuesto motín en la cárcel de mujeres del Guatao.
Consideran también en su carta "imprescindible y urgente" que se respete el derecho de asociación, de reunión, de manifestación y de expresión de todas las organizaciones de la sociedad civil cubana, incluyendo las que luchan contra la violencia de género, "si de verdad se quieren promover políticas públicas y mecanismos de prevención".
"Hacemos un llamado a las instituciones públicas para que trabajen con seriedad y transparencia, a que se tomen en serio lo que están promoviendo. Granma cita que 16.116 mujeres y niñas cubanas viven en hogares violentos, y sabemos que están sin acceso a recursos de información, prevención, acompañamiento, refugios, policiales ni judiciales. Es decir, más de 16.116 mujeres y niñas están en riesgo de violencia feminicida", expresan los firmantes.
"Autoridades cubanas, nos están matando. ¡Actúen ya! Ciudadanía, acompáñenos ¡No permitamos más la inacción!", concluyen.