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política

Un ex oficial de la CIA cree que los gobiernos de Rusia y Cuba están detrás del Síndrome de La Habana

Marc Plymeropoulos califica el reciente informe de la Inteligencia de EEUU de 'golpe al estómago' y dice sentirse traicionado.

Miami
El exoficial de la CIA Marc Polymeropoulos.
El exoficial de la CIA Marc Polymeropoulos. NBC News

El exoficial de la CIA Marc Polymeropoulos cree que los gobiernos de Cuba y Rusia están detrás de los incidentes de salud no esclarecidos que sufrieron diplomáticos, oficiales de inteligencia y funcionarios de Estados Unidos, conocidos como Síndrome de La Habana, publicó América TeVé.

Polymeropoulos, con rango equivalente a general de tres estrellas, y quien padeció síntomas relacionados con estos incidentes, calificó de "golpe al estómago" el reciente informe de la Comunidad de Inteligencia estadounidense, según el cual detrás del misterioso fenómeno no hay un adversario extranjero ni un arma sofisticada.

"Cuando el Gobierno de Estados Unidos dice: 'Sabemos con seguridad que ni los cubanos ni los rusos estaban involucrados', me digo '¿cómo?'. No conocemos las interioridades de lo que pasa en La Habana", opinó Polymeropoulos en la primera parte de una extensa entrevista con el canal estadounidense transmitida este lunes.

Según Polymeropoulos, todo podría haber comenzado como una operación de La Habana y Moscú para recolectar información de inteligencia a través de señales. Al darse cuenta de que el uso de pulsaciones de energía dirigida podía afectar la salud de los oficiales estadounidenses en el terreno, el proceso fue evolucionando hasta derivar en un arma.

"Quizás cuando empezaron estaban tratando de escuchar conversaciones internas, de recopilar información de los teléfonos y dispositivos, pero entonces lesionaron a algunos y dijeron: 'un momento, pudiéramos usar esto como arma", declaró Polymeropoulos. 

"Nadie puede llegar a saber quién fue ni detectarla; eso es exactamente lo que el servicio de inteligencia cubano quería. ¿Acaso querrían tener oficiales de inteligencia estadounidenses en La Habana? Es exactamente lo que los oficiales rusos querían: sacarnos del campo de batalla de una forma difícil de detectar", añadió.

El exoficial de la CIA dijo: "No me agrada decirlo, no quiero darles crédito, ha sido una campaña que les salió bien y causó gran consternación al Gobierno estadounidense aún hoy", 

"Diría que tiene todas las características de una medida activa rusa. Es como luciría una acción exitosa, de las que causan miedo al adversario, saca a la gente de sus labores, distrae. Ha causado todo tipo de controversia dentro de nuestro Gobierno. Así que es una de esas cosas que van a perdurar en la historia del espionaje", consideró.

El pasado 1 de marzo, la Oficina de la Directora de Inteligencia Nacional, Avril D. Haines, publicó las conclusiones del informe titulado "Evaluación sobre Incidentes Anómalos de Salud". Siete agencias de inteligencia descartaron la posibilidad de que se hubiera usado algún tipo de arma o hubiese algún adversario extranjero detrás de los extraños episodios que comenzaron en La Habana en 2016 y se fueron sucediendo en numerosos países de todo el mundo hasta poco antes de la invasión de Rusia a Ucrania en febrero del 2022.

Para Polymeropoulos,"la idea de que no existe un Estado involucrado es inexplicable". 

"Yo entendería si dijeran: 'no sabemos, simplemente, no sabemos'. Esa es una evaluación inteligente de un oficial de inteligencia. ¿Cómo pudimos pasar del reporte de la Academia Nacional de Ciencias, Ingeniería y Medicinas (de diciembre de 2020), que concluyó que nuestras lesiones habían sido causadas por un arma de energía directa, a este Informe difundido la semana pasada?", cuestionó.

Polymeropoulos contó a América TeVé la pesadilla que comenzó a sufrir desde aquella noche de diciembre de 2017 cuando fue víctima de uno de estos misteriosos episodios, que califica de ataque, en un hotel en Moscú, Rusia. En ese entonces se desempeñaba como máximo responsable de las operaciones del Servicio de Clandestinaje de la CIA para Europa y Eurasia.

Para el autor del libro Claridad en medio de crisis, todo empezó en La Habana, por alguna razón, en 2016. "En aquel momento hubo una apertura de las relaciones; fue una decisión de la Administración Obama. Pero la gente no entiende que en ese momento la guerra entre los servicios de inteligencia de los Estados Unidos y Cuba era más fuerte que nunca".

En este sentido, añadió: "No fue la inteligencia cubana la que decidió tener mejores relaciones con los Estados Unidos. Nuestros oficiales en La Habana eran blancos fáciles, creo que eran blancos oportunos para los cubanos. ¿Tenía el Gobierno cubano la tecnología para hacer esto solo? Quizás no. Mi opinión es que fue junto con los rusos, pero tiene algún sentido, considerando la historia de la presencia rusa en la Isla".

Marc Polymeropoulos dijo, no obstante, que no tiene evidencia respecto al fenómeno en su conjunto. Si se tratara de una evaluación de caso, como oficial de inteligencia activo, dijo que tendría que responder: "no sé, tengo una hipótesis, hay que seguir investigando".

"Hubiera preferido recibir un disparo porque podría mostrarlo como evidencia", declaró. 

El entonces oficial de la CIA tuvo que retirarse de la agencia en julio de 2019, debido a los traumas que le dejó en Moscú el llamado Síndrome de La Habana.

Marc Polymeropoulos trabajó durante 26 años en la CIA. Ha sido uno de los altos oficiales más condecorados de su generación, con las medallas de Inteligencia de carrera y por Servicio Distinguido. Es un experto en contraterrorismo. Ha estado destacado en los escenarios de mayor conflicto en el mundo: Medio Oriente, Asia, Iraq, Afganistán y Siria.

La semana pasada, el senador republicano por la Florida Marco Rubio rechazó también la evaluación desclasificada de la comunidad de inteligencia de Estados Unidos sobre los "incidentes anómalos de salud" conocidos como el "síndrome de La Habana", en una declaración en la que opinó que hubo apuro por llegar a una conclusión mientras "quedan varias preguntas" en torno a los hechos.

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6 comentarios

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Profile picture for user cubano libre

Este es un verdadero súper agente, gracias a su suspicacia el Agente Marc Papanicolau ha descubierto el misterio del síndrome de Labana, yo siempre pensé que detrás de todo estaban los gobiernos de Burundi y de Singapur, gracias al súper agente Marc el iluminado por solucionar tan difícil caso.

Como este hombre dice lo que se quiere oir entonces "si sabe de lo que esta hablando"...les recuerdo a los ilustres comentaristas que esos "ataques sonicos" no solo ocurrieron en Cuba y sintomas parecidos aparecieron en otros paises...tambien fueron rusos y cubanos???....

Vulgar Bocachancla.
Efectivamente ocurrieron en otros paises... igual que también en otros paises la gente come, bebe, se pasea libremente o se va al parque de atracciones.
En Cuba, en cambio, ni comemos, ni bebemos, ni paseamos libremente, ni tenemos parques de atracciones. Eso sí tenemos a Villa Marista para pasear libremente dentro de sus acogedoras celdas y chanchear sus desperdicios servidos en unas planchas de de comida.
Por cierto, también tenemos clarias idiotas y, excepcionalmente, algún imbécil. No obstante somos conscientes que cada uno sobrevive como puede.

Profile picture for user Ana J. Faya

Este señor sabe de lo que está hablando. En Cuba no sucede nada de ese tipo de ataque sin que el régimen esté detrás, ni cuenta con aparatos sofisticados propios capaces de provocar ese daño. Y las lesiones de los diplomáticos (o personal de inteligencia) están ahí, las de los de EEUU y los de Canadá. Personas escogidas, no afectadas por casualidad, ni parte de un grupo mayor de diplomáticos y cubanos. La pregunta es por qué no le convino ni a Obama, Trump ni a Biden acusar a Rusia y de paso a Cuba. Que El Niño Trudeau se calle no es noticia, pero que EEUU tire la toalla es para preguntarse por qué.

Pues claro que hubo un ataque y claro que ese último reporte es una mierda. Detectar pulsos de radiofrecuencia no es tan difícil, hay miles de aparatos que los usan, incluyendo los radares. Lo que sí da un miedo del carajo es darse cuenta de hasta donde han penetrado los rusos y cubanos la “inteligencia” norteamericana. Y el trabajo que les cuesta darse cuenta de ello y admitirlo. Porque sería el primer paso para arreglarlo. Despierten, cojones!