El cubano que resultó herido en la explosión ocurrida en La Habana Vieja en la madrugada del miércoles falleció durante la tarde del propio día, en el Hospital Calixto García, donde había sido ingresado. De esa forma, el número de víctimas fatales del accidente, provocado por una fuga de gas, se elevó a dos.
La muerte del mecánico de refrigeración, llamado Reynaldo y conocido como "Camagüey", se produjo sobre las 3:00PM de este miércoles, según dijo a DIARIO DE CUBA Luís Rodríguez vecino del lugar. El incidente ocurrió en el antiguo Taller de Carpintería de Aguacate No. 466, entre Teniente Rey y Muralla.
"Yo vi cuando lo sacaron y era imposible que sobreviviera, tenía una mano colgando de un hilito y una pierna totalmente destruida. El otro mecánico ya estaba muerto en el acto. Me llamó la atención que ambos estaban llenos de esquirlas del botellón de oxígeno que explotó. Era como si hubiera explotado una granada. Yo vi en Angola heridos así lleno de esquirlas", contó la fuente.
"Son muy lamentable las muertes de ambos, eran buenas personas y serviciales. Tenían que hacer inventos para sobrevivir, y ponerse a dar puntos de soldadura por la madrugada con equipos inventados, sin medidas de seguridad les costó la vida", añadió.
Jenny Fumero, también vecina del lugar explicó que "Rey o Camagüey, cómo le decían, por ser natural de esa ciudad, era muy servicial y conversador. Ahora los vecinos mandamos ropas para que lo vistieran, porque aquí en La Habana sólo tiene una prima. No sé dónde lo van a velar. Él decía que venía de Camagüey, de por el Combinado Cárnico. Es una tragedia lo ocurrido y todos estamos muy impresionados. Menos mal que la explosión ocurrió por la madrugada, porque si hubiera ocurrido de día hubieran sido muchos muertos y hasta niños del cercano circulo infantil".
La explosión ocurrió aproximadamente a las 12:00PM de la madrugada del miércoles, de acuerdo al reporte en Facebook Consejo de la Administración Municipal de La Habana Vieja. La causa fue una fuga de gas, que se produjo cuando las los dos mecánicos ahora fallecidos reparaban un refrigerador.
El número 466 se va haciendo fatídico en La Habana Vieja. En octubre de 2022, ocurrió un derrumbe en el mismo número, pero de la calle Sol, a solo unas cuadras del taller donde se produjo este nuevo accidente fatal. Producto de aquel suceso, murió una niña de cinco años.
