La Justicia Federal brasileña decidió autorizar la reincorporación de profesionales cubanos que laboraban en el programa Más Médicos durante el gobierno de Dilma Rousseff, con contratos de dos años sin prórrogas y que decidieron establecerse en ese país, informó la Agencia Brasil.
La decisión atiende a una solicitud de la asociación que representa a 1.700 estudiantes cubanos de intercambio que se quedaron en Brasil y fue firmada el viernes 27 de enero por el juez Carlos Augusto Pires Brandão, de Brasilia.
La asociación argumentó que los médicos que llegaron al país para trabajar en el programa Más Médicos no tuvieron su contrato renovado durante el programa Médicos por Brasil, creado durante el Gobierno de Jair Bolsonaro.
Los profesionales cubanos tenían un contrato de dos años improrrogables, mientras que la convocatoria para los demás estudiantes de intercambio determinaba tres años de trabajo, renovables.
Al analizar los argumentos, la corte destacó la importancia del programa para atender a la población que vive en municipios necesitados y para ayudar en la crisis humanitaria que involucra al pueblo indígena yanomami. La decisión también remite a cuestiones humanitarias de los médicos cubanos que permanecieron en Brasil, después de que el Gobierno cubano determinara sacar a los profesionales del país.
"Es evidente la quiebra de la expectativa legítima de estos médicos que, en su mayoría, ya formaron familias en suelo brasileño. Luego de la contratación jurídicamente perfecta de sus servicios por parte del Estado, que se prolongó en el tiempo, parece plausible imaginar que los médicos cubanos aquí representados reprogramaron sus vidas, de acuerdo con las expectativas formadas a partir de estas contrataciones, y parece justo reconocer que ahora pretenden permanecer en Brasil", dijo el juez.
Una serie de reportajes publicados por DIARIO DE CUBA entre finales de 2018 y principios de 2019 reveló que el programa Más Médicos instaurado durante el Gobierno de Rousseff fue en realidad propuesto por el régimen de La Habana.
La investigación también mostró que el Gobierno cubano se quedó con más del 70% del salario de los médicos, que el Gobierno brasileño estuvo de acuerdo con esto desde un inicio y que la Organización Panamericana de la Salud actuó como intermediaria.
A su llegada al poder, el ahora ex presidente de Brasil Jair Bolsonaro exigió que los médicos cubanos recibieran de manera íntegra los salarios que pagaba por ellos Brasil, que revalidaran sus títulos y que sus familias pudieran acompañarlos.
La retirada del Más Médicos en 2018 fue un duro golpe y no parece que La Habana vaya a poder enviar a Brasil una cantidad de profesionales similar a la que tenía allí antes de la llegada al poder de Bolsonaro, pese a que Luis Inácio Lula da Silva restaurará el programa.
En noviembre del año pasado, diez días después de la victoria electoral de Lula, el senador Humberto Costa, integrante del equipo de transición del presidente electo, informó que el nuevo Gobierno pretendía lanzar una campaña para retomar el programa Más Médicos, pero con médicos cubanos que se quedaron en Brasil y nacionales graduados.
A inicios de enero, el Gobierno de Lula confirmó que retomará el Más Médicos, pero los profesionales exportados por el régimen cubano no ocuparían la mayoría de las plazas como en la versión anterior.
"La agenda de retomar Más Médicos es inmediata. Queremos colocar galenos en todos los municipios brasileños en un corto período de tiempo", dijo el secretario de Atención Primaria del Ministerio de Salud del país, Nesio Fernandes, en declaraciones citadas por la agencia estatal Prensa Latina.
El funcionario explicó que en la contratación se priorizará a los médicos brasileños con registro en los consejos regionales y que se ofrecerán plazas a los nacionales formados en el exterior. Después de eso, otros puestos serán ocupados por extranjeros, precisó Fernandes.
Aunque es probable que el régimen de la Isla envíe a sus profesionales para ocupar plazas destinadas a los extranjeros, las nuevas características del programa reducen su posibilidad de obtener ganancias.
Los profesionales de la salud se convirtieron en las últimas décadas en el principal renglón exportable del régimen cubano. Los servicios de salud humana y servicios de atención generaron al Gobierno de Cuba 3.997.948,3 de los 6.879.664,9 millones de pesos ingresados en 2020, por concepto de exportación de servicios. La salud fue exactamente el 58,1% de ese total. El régimen se queda con al menos el 75% del salario que pagan por los médicos los países receptores.
Además de tener que entregar la mayor parte de sus salarios, los profesionales de la salud cubanos enviados a misiones en el exterior son sometidos a una fuerte vigilancia ya la restricción de sus libertades fundamentales.
Estas condiciones han sido denunciadas por organizaciones defensoras de derechos humanos y la ONU ha advertido que podrían constituir formas de "trabajo forzoso" y "esclavitud moderna".
Fue una (otra) estupidez del gobierno Bolsonaro no darle una salida decorosa a los médicos cubanos que estaban locos por quedarse en Brasil. Bastaba una ley del tipo "pueden seguir ejerciendo como médicos SOLO en los lugares donde están ubicados" y pagarles integralmente sus salarios insistiendo en que podían traer sus familias. Hubieran puesto al gobierno cubano contra la pared y la opinión pública brasilera lo hubiera aplaudido. Si sin eso se quedaron más de mil, imagina... Pero bueno, "não adianta chorar pelo leite derramado"