El Censo de Población y Viviendas en Cuba no se desarrollará en septiembre próximo como estaba previsto, debido a la falta de recursos para llevarlo a cabo, informó el diario oficial Granma.
El órgano oficial del Partido Comunista de Cuba obtuvo citó a Diego Enrique González Galbán, director del Centro de Estudios de Población y Desarrollo (CEPDE) de la Oficina Nacional de Estadística e Información (ONEI).
González Galbán dijo que la preparación de un censo de esta naturaleza necesita de un trabajo previo de dos años como mínimo, que coincidieron con el enfrentamiento a la pandemia. El funcionario añadió que esto impidió realizar las acciones de terreno relacionadas con la actualización cartográfica (mapificación del territorio nacional a nivel de manzanas).
Ahora, añadió González Galbán, se impulsa el registro previo para levantar todas las viviendas ocupadas por residentes permanentes y la infraestructura económica y social del país. En el último trimestre del año se efectuará el ensayo del operativo censal en el municipio de Santa Cruz del Norte, en Mayabeque.
González Galbán informó que se van a introducir nuevas tecnologías en el próximo levantamiento censal, lo cual ahorrará tiempo y recursos. La información será digitalizada mientras se toma en los hogares, pero esto requerirá como mínimo de 40.000 tablets e igual cifra de profesionales contratados.
Cerca de 1.400 de estos dispositivos ya fueron donados por organizaciones colaborativas como el Fondo de Población de las Naciones Unidas, el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia y la Unión Europea, señaló el director del CEPDE.
Al parecer, tras el aplazamiento, la aplicación del Censo de Población y Viviendas no tiene fecha concreta. González Galbán no habló de un calendario definitivo para la realización del estudio demográfico.
El funcionario dijo que la utilización de otros métodos estadísticos arrojó que a finales de marzo Cuba tenía 11.105.814 habitantes, 75.781 menos que al cierre de 2020. Esta diferencia refleja el enorme éxodo de cubanos en lo que va siendo la mayor crisis migratoria de la historia de Cuba, además de las muertes causadas por la pandemia de Covid-19.