El Gobierno de Cuba volvió a abstenerse en una votación en la Asamblea General de la ONU que exigió el "cese inmediato" de la invasión de Rusia contra Ucrania y de "todo ataque contra civiles y objetivos civiles".
La resolución, aprobada con 140 votos a favor, cinco en contra y 38 abstenciones, entre ellas la de Cuba, es la segunda resolución en menos de un mes de la comunidad internacional sobre el tema. Fue presentada por Ucrania y promovida por México y Francia.
Bielorrusia, Corea del Norte, Eritrea, Siria y Rusia votaron en contra del documento, al igual que lo hicieron en la primera resolución adoptada el pasado 2 de marzo.
China, Bolivia, Cuba, El Salvador, Nicaragua e Irán fueron algunos de los 38 países que se abstuvieron en esta ocasión.
Una segunda resolución sobre la situación humanitaria que sufren millones de ucranianos desplazados propuesta por Sudáfrica, en cuyo texto no se mencionaba a Rusia, fue rechazada por 67 votos en contra, 50 a favor y 36 abstenciones.
El embajador ucraniano ante la ONU, Sergiy Kyslytsya, intentó evitar la votación de la segunda resolución al considerar que el texto "nunca fue producto de consultas con Ucrania ni de consultas regionales", a diferencia del primero.
Esta es la segunda derrota consecutiva que sufre Rusia después de que la víspera una resolución presentada por Moscú, también sobre la situación humanitaria, fue rechazada en el Consejo de Seguridad, que solo recabó los votos positivos del representante de Rusia y China, mientras que los 13 miembros restantes se abstuvieron.
El pasado 2 de marzo, en una decisión histórica, 141 países votaron a favor de otra resolución de condena de la invasión rusa frente a 35 abstenciones (entre ellas China, Cuba, Nicaragua, El Salvador, Bolivia, India, Irán, Irak, Kazajistán y Pakistán) y cinco votos en contra (Corea del Norte, Siria, Bielorrusia, Eritrea y la propia Rusia).
En esa ocasión, la posición de La Habana contrastó con su apoyo abierto a Rusia tras la invasión, una postura que se ha vuelto más ambigua, con llamados a evitar la fuerza para la resolución de los conflictos y a volver a las negociaciones.
De hecho, el de Cuba, de conjunto con Rusia, Venezuela, China y Eritrea, fueron los únicos gobiernos que votaron en contra de que se celebrara la reunión urgente de la Asamblea General del 2 de marzo para, tras el fracaso de una votación similar en el Consejo de Seguridad, expresar la condena de la invasión de Moscú contra Ucrania.
Aunque el resultado de la votación no es vinculante, por lo que Rusia no está obligada a cumplirla, pone en evidencia el concierto internacional que repudia la invasión.