Un total de 116 emigrantes cubanos regresaron el miércoles al país procedentes de México, con lo que la Dirección de Identificación, Inmigración y Extranjería (DIIE), del Ministerio del Interior (MININT), cuantifica en lo que va de año 15 operaciones de retorno procedentes de diferentes países, publicó el diario oficial Granma.
Al aeropuerto internacional José Martí arribaron 80 hombres y 36 mujeres, quienes salieron de forma legal de Cuba y posteriormente transitaron, de manera irregular, por México, con el objetivo de ingresar a Estados Unidos.
"A estas personas se les realizó la identificación correspondiente, una pesquisa sanitaria, recibieron el control sanitario internacional y aduanero, así como se les brindó alimentación y se trasladó a sus provincias de origen", señaló la nota.
El mismo día, en horas de la mañana el Servicio de Guardacostas de Estados Unidos devolvió por el puerto de Orozco, en la provincia de Artemisa, a 42 personas —35 hombres y siete mujeres—, quienes salieron de la Isla en medios rústicos no apropiados para la navegación.
Esta operación es el resultado de tres intercepciones en el mar de emigrantes irregulares detenidos por las autoridades estadounidenses.
Un comunicado de la Guardia Costera estadounidense señaló que desde el pasado 1 de octubre de 2021, sus tripulaciones interceptaron a 842 cubanos. Durante todo el año fiscal 2021 la cifra alcanzó solo 838 emigrantes.
De forma general, en lo que va de año han sido devueltas al país 695 personas, de ellas 333 por el Servicio de Guardacostas de Estados Unidos, 326 desde México y 36 de Bahamas.
Asimismo, las autoridades migratorias cubanas precisaron que se aprecia una tendencia al aumento en la cantidad de personas deportadas con respecto al año anterior. Al cierre de 2021 se habían efectuado 71 operaciones y 1.580 personas devueltas.
El Gobierno de Cuba culpa del creciente flujo migratorio irregular al Gobierno de EEUU. Lo acusa de negar visas a ciudadanos cubanos y también del recrudecimiento del embargo, que lo presenta como causa de la fuga de cubanos.
También acusa a Washington de violar el "cumplimiento estricto de lo acordado en la Declaración Conjunta Cuba-Estados Unidos sobre temas migratorios, del 12 de enero de 2017, donde ambas partes patentaron el compromiso bilateral en la prevención de la migración irregular y de impedir las salidas ilegales y riesgosas del país".