Por fin, una semana después de la aparición en la revista independiente El Estornudo de las acusaciones de cinco cubanas contra el músico Fernando Bécquer por presuntos abusos sexuales, el Noticiero de la Televisión Cubana dedicó un espacio de su emisión del 15 de diciembre a pronunciarse contra la violencia de género, sin mencionar las denuncias, ni a las presuntas víctimas ni al presunto agresor.
"Los últimos días han sido de un debate visceral sobre este tema", afirma el periodista de la Televisión cubana, Abdiel Bermúdez, sin hablar del artículo publicado en El Estornudo ni referirse al medio independiente. "Varias mujeres narraron sus historias, como víctimas de un ultraje sexual. Y aunque han pasado los años, las cicatrices siguen ahí, intactas, como pervive lamentablemente un machismo que agrede desde el abuso sexual, la descalificación, o también desde el abuso sexual...", dice el periodista sin mencionar a las cubanas que acusaron al trovador Bécquer ni a este.
"Sucesos así no pueden quedar en silencio, entre otras muchas razones, para que no se repitan. Por eso, tanto se habla de que la denuncia es el primer paso, y cuesta, cuesta mucho. A veces, por vergüenza, por temor al qué dirán", reconoce Bermúdez.
Aunque no hizo mención del medio que primero publicó las denuncias que han dado lugar al "debate" que describió como "visceral", el reportero sacó a relucir las declaraciones que publicaron la Federación de Mujeres Cubanas (FMC) y el Centro de Educación Sexual (CENESEX) a propósito de los sucesos, también sin mencionar ni a las presuntas víctimas ni al presunto agresor.
Afirmó que la reciente publicación en la Gaceta Oficial de la República de la Estrategia Integral de Prevención y Atención a la Violencia de Género y a la Violencia en el Escenario Familiar, "como un acuerdo además del Consejo de Ministros, confirma la posición del Gobierno y el Estado cubanos ante este fenómeno".
Recordó que la violencia de género "está reconocida como problema estatal en el Artículo 43 de la Constitución. También en los Lineamientos del Partido y el Programa Nacional para el Adelanto de las Mujeres".
Según el periodista, aunque hay quienes apuestan "o apostamos, por la pertinencia de una Ley de género, también es verdad que existen garantías para que no haya impunidad en estos casos".
Contrario a la convicción del periodista, muchas cubanas han denunciado acoso y agresiones por parte de sus ex parejas, y no han recibido la atención adecuada de la Policía. Varias terminaron asesinadas por sus ex parejas.
Ni la Asociación Hermanos Saíz ni la Asociación Cultural Yoruba se han pronunciado hasta ahora
Entre instituciones de la Isla que se han pronunciado, sin mencionarlos, sobre los presuntos abusos sexuales sufridos por cubanas a manos del músico Bécquer destacan dos ausencias: la de la Asociación Hermanos Saíz (AHS) a la que perteneció el músico denunciado y a la que pertenece la escritora Elaine Vilar Madruga, quien también afirma haber sido víctima de Bécquer y ha iniciado una demanda contra el músico.
Hasta el 15 de diciembre, una semana después de la publicación del reportaje, no había ningún pronunciamiento al respecto ni en la página oficial de la AHS ni en su página de Facebook. DIARIO DE CUBA llamó a la sede nacional de la Asociación, ubicada en el Pabellón Cuba, en La Habana, para intentar obtener declaraciones de sus directivos, pero no se encontraban ni el presidente, Rafael González Muñoz; ni el vicepresidente de creación, Reinaldo Armando Montalvo Vasallo; ni el jefe de departamento de especialistas, Yansert Fraga León.
¿Qué tiene que decir la AHS sobre las acusaciones de varias mujeres contra el músico Bécquer, quien, mientras la edad se lo permitió, fue miembro de esta institución oficial, que agrupa a artistas e intelectuales jóvenes de toda la Isla? ¿Qué tiene que decir sobre el hecho de que una de estas jóvenes, miembro actual de la Asociación, haya denunciado también haber sufrido abusos sexuales de Bécquer?
Tampoco la oficialista Asociación Cultural Yoruba de Cuba se ha pronunciado para condenar los hechos, cometidos presuntamente haciendo un uso ilegítimo de esta religión afrocubana, ni para explicar cuáles prácticas son legítimas y cuáles no, para evitar que otras mujeres sean víctimas de abusos como los que describieron las presuntas víctimas, por ignorancia de esa religión.
El pronunciamiento más reciente ha sido el de la FMC, que el 14 de diciembre publicó un comunicado en el que condena "todo tipo de violencia basada en género".
"Hace pocos días sonaron las alarmas: varias mujeres cuentan sus historias de vida, cuando fueron ultrajadas sexualmente, y aunque han pasado los años, las cicatrices continúan abiertas", se puede leer en el texto publicado por la organización estatal, que no mencionó directamente el reportaje de la revista El Estornudo ni el nombre del trovador acusado.
Días antes, el comunicado del CENESEX se centró en defender su trabajo y lanzar acusaciones de "manipulación" contra la Revolución, el Estado, el Gobierno y la directora de la institución, Mariela Castro Espín.
Por su parte, el director del Centro Pablo, Víctor Casaus, hizo suyo un post de la trovadora Rita del Prado en una declaración oficial de la institución que publicó en su página de Facebook y se sumó a quienes apoyan a las cinco cubanas que denunciaron al músico, con el hashtag #ElCentroPablolescree.
En el post que hizo suyo Casaus, la trovadora Del Prado sostiene que "lo que menos importa aquí es la postura política del periódico digital que primero les hizo caso y las publicó, como tampoco importa la postura ideológica de quien cometió los actos. Poner el acento en eso, es desviar la atención", en referencia a los cuestionamientos de la veracidad de las denuncias, basados en que fueron publicadas en un medio independiente.
Sus palabras también apuntan a las respuestas evasivas de Fernando Bécquer, quien ante las preguntas de DIARIO DE CUBA sobre los presuntos abusos se escudó en que solo cree "en la Revolución".