Una joven cubana de 28 años llamada Raidelis Blanco Almenares fue asesinada por su pareja dentro de su vivienda, ubicada en la comunidad rural de Maffo, del municipio de Contramaestre, en Santiago de Cuba, según informaron plataformas feministas.
De acuerdo a la página de Facebook #YoSíTeCreoenCuba, la joven se desempeñaba como instructora de arte, y su hijo en común con el agresor, de solo tres años de edad, presenció el crimen ocurrido el sábado 5 de septiembre.
"Esta plataforma reitera la urgencia de crear un sistema de atención especializada a mujeres que viven en situación de violencia machista, con la creación de refugios temporales para ellas y sus hijes, con la participación de los gobiernos locales, la comunidad y las activistas feministas", escribieron las responsables de #YoSíTeCreoenCuba.
La revista feminista Alas Tensas también se pronunció al respecto en sus redes sociales, recordando que con este caso son 15 los verificados por observadoras independientes en lo que va de 2020, por lo que lo calificaron a los crímenes impulsados por la violencia machista como una "pandemia invisible".
La divulgación de casos de violencia de género en la Isla se hace cada vez más frecuente, mientras la prensa oficial calla la grave realidad de los feminicidios e incluso ataca a quienes lo denuncian, catalogando el fenómeno como "revictimización".
Una cubana identificada como Kirenia Tamayo Verdecia, residente en el municipio de Jobabo, en Las Tunas, denunció este domingo a través de la plataforma feminista #YoSíTeCreoenCuba que el ciudadano Yunior Sánchez Salgado la atacó brutalmente cuando se encontraba en su puesto de trabajo como custodio de una escuela, causándole fracturas en dos costillas y lesiones en el resto del cuerpo tras golpearla con un tubo.
Tamayo Verdecia señaló que por fortuna la unidad de la Policía queda al lado de la escuela donde fue agredida, por lo que Sánchez Salgado fue detenido, pero luego liberado con una fianza de 1.000 pesos.
El agresor, contó Tamayo Verdecia, fue su pareja hasta cuatro meses atrás, cuando decidió poner fin a la relación, pero desde entonces la amenaza e incluso la ha agredido en otras ocasiones.
Además, Sánchez Salgado fue oficial de Policía, de donde tuvo que ser removido por sus propias actitudes violentas, pero a pesar de ello sigue en libertad sin mayores sanciones, por lo que Tamayo Verdecia asegura que su vida corre peligro.
"¿Los fiscales no conocen esto? ¿Cómo es posible que solo le pongan fianza a una persona tan violenta que hasta la Policía lo separó de sus filas por su agresividad y peligrosidad de su conducta?(...)¿Dónde está la responsabilidad de la Fiscalía de instruirlos de cargo por el delito de atentado, dadas sus constantes amenazas y perturbaciones?", escribió Tamayo Verdecia, quien reclama que le cambien "la medida cautelar por una prisión preventiva hasta que se celebre el juicio oral, donde se demuestre que es un delincuente violento y vaya a prisión".
Desde el inicio del confinamiento han repuntado las cifras de violencia machista en la Isla. La plataforma independiente #YoSíTeCreoenCuba, tras la apertura de una consulta telefónica para apoyar a las mujeres en situación de vulnerabilidad, dijo haber recibido más de 30 peticiones solo en los tres primeros meses de la pandemia.
Un reciente reporte emitido por el Noticiero de Televisión oficial reconoció el agravamiento de la violencia de género en el país.
En mayo del 2019 el Gobierno reconoció por primera vez la existencia de feminicidios en la Isla, cuando en el primer Informe Nacional sobre la implementación de la Agenda 2030 incluyó los datos de los asesinatos de mujeres a manos de sus parejas o exparejas que ocurrieron en el año 2016.
Un grupo de 40 activistas cubanas presentó en noviembre de 2019 una solicitud de Ley Integral contra la Violencia de Género a la Asamblea Nacional del Poder Popular, pero a inicios del año recibieron la confirmación de que la norma jurídica que demandan no está contemplada en el Programa Legislativo a ejecutarse hasta 2028.
A pesar de ello, un reciente artículo del diario oficial Granma presentó la "mediatización del feminicidio" como parte de una supuesta "guerra comunicacional hacia la sociedad cubana".
El texto del órgano del Partido Comunista de Cuba (PCC), que ha levantado la repulsa unánime de la sociedad civil independiente en las redes sociales y de las activistas cubanas contra la violencia machista, realiza comparaciones de feminicidios en Cuba con países de América Latina o Europa, donde no se escamotea la información y se publica cuando salen a la luz los asesinatos de mujeres.
