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Covid-19

'Estoy menos hacinado en una cola para comprar pollo que en este solar'

Así va la cuarentena en Los Sitios, el barrio de mayor concentración poblacional de La Habana.

La Habana
Cola en el mercadito de Reina y Manrique. Los Sitios, La Habana.
Cola en el mercadito de Reina y Manrique. Los Sitios, La Habana. DDC

Aumentan los contagios por Covid-19 y los casos sospechosos, pero en Los Sitios, Centro Habana, la vida transcurre como si no existiese la pandemia que ha alcanzado a casi 1.500 personas en Cuba y matado a 58.

El Gobierno municipal anunció el cierre de algunas zonas de ese consejo popular, el de mayor concentración poblacional en toda La Habana, pero en un recorrido por el barrio fue posible ver un amplio movimiento de personas, incluso en una cuadra en la que fueron confirmados al menos tres casos positivos.

Uno de los sospechosos de contagio, ingresado hace tres días en el centro de aislamiento habilitado en la Universidad de Ciencias Informáticas (UCI), envió fotos de la alimentación y del cubículo donde está recluido. Los vecinos de la cuartería en la que vive las circularon entre risas y comentarios como "no está mal la 'jama' ni el lugar tampoco".

Los vendedores ambulantes, casi la única fuente de abastecimiento de alimentos en la zona, no tienen que preocuparse: en Los Sitios la presencia de autoridades policiales es casi inexistente. Los pregones se mezclan con el llanto de los niños, el bullicio de adolescentes y las protestas por la escasez del agua potable.

"Mantener la higiene, con esta situación del agua y en medio de la pandemia, es un reto para los ovarios de Mariana Grajales", vocifera una madre de dos niñas de seis y ocho años de edad, miembro de un núcleo familiar de nueve personas que incluye a dos ancianos, y vecina de una ciudadela donde el suministro "hace tres días no entra".

En un barrio donde hay unas 45 ciudadelas, y donde viven en condiciones de hacinamiento más de 30.000 personas, la tasa de contagio por Covid-19 es de casi 39 casos por cada 100.000 habitantes. No contar con un servicio regular de agua potable supone un riesgo de propagación de la epidemia, y muchas familias no pueden darse el lujo de lavar diariamente toda la ropa usada, como aconsejan las autoridades de Salud Pública.

A consecuencia del irregular abastecimiento de alimentos y productos de aseo personal e higiene en los establecimientos y comercios de la barriada, los residentes de Los Sitios están obligados "a zancajear La Habana todos los días". Bajo condición de anonimato, un delegado del Poder Popular comenta que dos restaurantes de modalidad cooperativa, "que siempre han elaborado comida para llevar", cerraron.

"Sus administradores cogieron miedo a que los acusaran de acaparamiento o les pidiesen comprobantes de mercancías y productos que no se consiguen en tiendas estatales", explica.

"Los juicios y casos ejemplarizantes que ponen en el Noticiero han creado más pánico que el mismo coronavirus", reconoce este delegado y asegura haber advertido a las máximas autoridades del Gobierno en el municipio.

Aunque en Los Sitios no ocurren los apagones que sí continúan afectando a otros territorios habaneros, las tensiones dentro de los hogares se generan por la convivencia. Las discusiones están "a la orden del día", como en el solar de Rosita, "por tanto roce y tanta encimadera".

"No recuerdo cuándo fue la última vez que vi a mi marido más de 12 horas seguidas", grita Rosita, entre la algarabía de sus cinco nietos, mientras su esposo replica con una frase tajante: "me siento menos hacinado en una cola para comprar pollo que en este solar".

La programación de la televisión estatal no consigue entretener a niños y adolescentes, el problema "más duro" con el cual tienen que lidiar madres y padres en hogares de espacio reducido y grandes carencias.

Como advierte Rosita, su familia no puede costearse "la antena" y, para colmo de males, "los dos distribuidores del paquete semanal cerraron el negocio porque los dueños del local tienen miedo a que les digan que propician la propagación de la epidemia".

Lo único "extraordinario" que ha ocurrido en Los Sitios, desde que fue decretado el aislamiento social para toda la Isla, es la recogida de desechos sólidos. "Un barrio que durante años vivió, además de hacinado, rodeado de basura, ahora está limpio", dice Cari. Encargada de Vigilancia en el CDR de su cuadra, vive en los altos del solar de uno de los casos de contagio. Desde que lo supo no le "baja" la presión arterial.

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2 comentarios

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Profile picture for user cubano libre

Siempre quejándose.............¿por qué no linchan a la famiglia Castro?

¡Cuidado, ciudadanos, que el edificio amenaza con desplomarse!