Washington llamó a los países que están recibiendo médicos enviados por el Gobierno cubano, en medio de la pandemia mundial de Covid-19, a proteger sus derechos.
La Habana "continúa violando múltiples convenios de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) que protegen los derechos de los trabajadores a organizarse, reunirse y negociar colectivamente", escribió el subsecretario de Estado interino para Asuntos del Hemisferio Occidental, Michael Kozak, en su cuenta en Twitter.
El Gobierno cubano y los países que continúan aceptando a profesionales de la salud de la Isla "deben cumplir con los compromisos de la OIT", añadió.
"Instamos a los países que reciben doctores cubanos a proteger sus derechos. Exigir a Cuba que deje de confiscar pagos y pasaportes. Requerir pruebas de credenciales médicas. Hacer públicos los acuerdos bilaterales", dijo Kozak.
"Las crisis no justifican el tráfico de profesionales médicos, que necesitan protección ahora más que nunca", concluyó.
La respuesta de las autoridades cubanas llegó a través de Johana Tablada, subdirectora de Estados Unidos en el Ministerio de Relaciones Exteriores de la Isla.
"Aquí vamos de nuevo con la nación más poderosa de la tierra difundiendo mentiras y calumnias, por oscuras motivaciones electorales, contra hombres y mujeres libres del personal de la salud de Cuba que arriesgan sus vidas para ayudar a otros", escribió Tablada en los comentarios a los tuits de Kozak.
"En lugar de atacar un esfuerzo noble, puede unirse a la cooperación y la solidaridad", dijo al funcionario estadounidense.
En las últimas semanas, las autoridades de la Isla han enviado centenares de profesionales de la salud a varios países del mundo que enfrentan la pandemia de Covid-19.
La venta de servicios profesionales, principalmente médicos, es la fuente más importante de ingresos del Gobierno cubano, que se queda con al menos el 75% de lo que pagan en salarios los países de destino.
Esa fuente de ingresos es más relevante ahora que el Gobierno cubano se ha visto obligado a mantener las fronteras cerradas al turismo.
La Habana es acusada de someter a los trabajadores que envía al exterior a condiciones de semiesclavitud. Además de quitarles al menos tres cuartas partes de los salarios, el Gobierno restringe sus libertades fundamentales retirándoles el pasaporte, prohibiéndoles contactos con nacionales y sometiéndolos a una fuerte vigilancia.
¡¡Por supuesto que NO!! Pero Cuba NO vende a sus médicos; LOS ALQUILA. Es una RENTA que le proporciona GANACIAS EN DÓLARES PARA EL RÉGIMEN , NO PARA INVERTIR EN SU MALTRECHO PUEBLO sin grandes complicaciones porque NO SON CAPACES DE PRODUCIR NADA. ¿Quién es responsable que ésto siga ocurriendo infinitamente...? ¡¡EL NOBLE Y SUMISO PUEBLO CUBANO!!