El periodista y escritor cubano Rodolfo Torres Rodríguez falleció este 16 de febrero en Berlín a causa de un cáncer pulmonar, informó el sitio independiente CiberCuba.
Torres Rodríguez no solo fue reconocido por su obra periodística y literaria, sino también por haber localizado y publicado el acta de inhumación del general Arnaldo Ochoa, quien fuera procesado por el régimen y condenado a pena de fuerte por el delito de narcotráfico en 1989.
El volumen Un cementerio que agoniza (2011), coescrito por el autor cubano residente en Alemania y la historiadora Magaly Cabrales, incluyó el acta de defunción del militar, que sorprendió por atribuir la causa de muerte del general a una "anemia aguda" y no al fusilamiento.
"El asesinato de Ochoa es uno de los actos más horrendos y vergonzantes que tendrá que registrar para siempre la historia de Cuba", dijo Torres Rodríguez en una entrevista publicada por Café Fuerte en 2012.
Torres Rodríguez también fue testigo de la exhumación de los restos de Ochoa, en 1991. "Viví con mucha tensión aquellos segundos, porque de veras que fueron apenas unos segundos, solo tenía ojos para mis espaldas y, con la boca seca, vi lo que ocurría en el sepulcro, entre los trabajadores", narró en Un cementerio que agoniza.
"Fue como una compuesta de escenas trastocadas que irían tomando su lugar con el tiempo y luego de averiguar y relacionar hechos que entonces no comprendía y desconocía… Todavía hoy hay caras y movimientos de ese día bien grabados en mi memoria", agregó.
El escritor cubano, licenciado en Periodismo por la Universidad de La Habana nació en Ciego de Ávila en 1950. Tras graduarse, trabajó como periodista del semanario oficial Trabajadores y como docente de la principal casa de altos estudios de Cuba.
Además, se desempeñó como soldado y sanitario mayor durante la guerra de Angola, en la década del 70. Tras su participación en la contienda publicó el libro de cuentos Mis hermanos en la guerra (Editorial Letras Cubanas, 1982).
Asimismo, es autor de otro volumen de cuentos: El camino del Infierno. Particularmente, en Un cementerio que agoniza incluye dos años de investigaciones y se basa en información extraída de los libros de enterramientos originales, documentos inéditos del Archivo Nacional de Cuba, y testimonios de sepultureros, historiadores y dolientes, apunta CiberCuba.
A la edad de su muerte, Torres Rodríguez tenía 69 años. Le sobreviven su esposa y dos hijos.
Sus cenizas, de acuerdo con el deseo de sus familiares, serán lanzadas al mar "para que [el escritor] pueda regresar a Cuba de nuevo, cumpliendo su más caro anhelo".
Anemia aguda fue provocada por las balas, uno se desangra y esa es la anemia.
Me refiero al acta de defunción.
No me parece muy cierta esta noticia!!!!
El cinismo de estos comunistoides es extremo. Pero todavía hay estúpidos que creen todo lo que ellos dicen. El mismo Ochoa creyó que el dictador le iba a perdonar la vida tal como le prometió, si se declaraba culpable.
Tenia entendido que el certificado de defunción habían puesto hemorragia devenida en hipovolemia, naturalmente un forense solo explica las causas biológicas del deceso y no tiene que poner que lo cocieron a balazos.
Se puede entender lo de la anemia, se le salió la sangre por los hecos de las balas
Sí, es la única explicación. No entiendo bien la noticia.
Ochoa? Muerte por anemia aguda? Otro eufemismo de los comunistas.