Este sábado se cumplen 30 años del fusilamiento del general de división Arnaldo Ochoa, el coronel Antonio de la Guardia, el mayor Amado Padrón y el capitán Jorge Martínez, tras la llamada Causa Número 1, que sacudió Cuba en 1989 y llevó además a la cárcel a una decena de oficiales del Ministerio del Interior y las Fuerzas Armadas.
Ochoa, condecorado como "Héroe de la República de Cuba", y los demás fusilados, fueron acusados de alta traición por actividades de narcotráfico en uno de los episodios más turbios del castrismo, que muchos analistas consideraron destinado a intentar tapar la participación de los Castro en negocios con el Cartel de Medellín y su líder, Pablo Escobar.
Patricio de la Guardia, hermano gemelo de Antonio, terminó de cumplir recientemente su condena de 30 años de cárcel, pero no hay confirmación de que haya sido liberado.
"Es muy triste (…) fue un proceso arbitrario, y eso lo confirmó una comisión investigadora de Naciones Unidas", dijo Ileana de la Guardia, hija del coronel Antonio de la Guardia, citada por Martí Noticias.
"Fue un asesinato judicial, y un asesinato judicial solamente se justifica para silenciar a alguien", afirmó por su parte el Miguel Fernández-Díaz. "A los que creían que estaban trabajando para el comandante en jefe les perdonaron la vida. Pero a los que sabían a ciencia cierta que estaban trabajando para el comandante en jefe, a esos había que silenciarlos".
El periodista español José Manuel Martín Medem, autor del libro El secreto mejor guardado de Fidel. Los fusilamientos del narcotráfico , dijo a DIARIO DE CUBA en 2014 que "gente muy próxima" a Ochoa le aseguró que él "quería discutir" con Fidel Castro "sobre el futuro de Cuba y proponía reformas, sobre todo en la gestión económica".
"También hubo discrepancias sobre el manejo de la guerra en Angola y la salida negociada" señaló Martín Medem. "Mi opinión personal es que la acusación contra Ochoa de 'traición a la patria' fue un montaje para justificar su fusilamiento".
El Consejo de Estado respaldó por unanimidad la pena de muerte dictada por el tribunal militar que juzgó a Ochoa y a los demás condenados. Solo un mes transcurrió desde que el castrismo acusó al general hasta su ejecución.
Ninguno de estos fue, es ni sera, Santo de mi Devocion, pero lo que Hicieron con El General Ochoa, fue la Traicion mas Grande, que haya concebido La Rata de Fidel Castro!! QUE HIJO DE PUTA !!!