El Gobierno cubano no tiene dinero para comprar leche en polvo, lo cual ha provocado "arribos tardíos del producto al país", reconoció un funcionario de la Industria Alimentaria, quien culpó al "bloqueo de EEUU" por esa situación.
"Este ensañamiento de la administración de Donald Trump ha incidido en la ampliación de los ciclos de reaprovisionamiento de las navieras, a lo que se han sumado las limitaciones financieras para adquirir la leche en polvo en el mercado internacional. Todo ello ha traído consigo arribos tardíos del producto al país", señaló Genisley Hernández González, segundo jefe de la División Agroalimentaria del Grupo Empresarial de la Industria Alimentaria.
"Se ha trabajado con mucha presión para poder cumplir con los ciclos de distribución de la leche. Por el atraso con el cual ha llegado el producto al país, hemos tenido que distribuirlo casi directo del puerto a las bodegas, sin tiempo para embolsarlo", aseguró, en declaraciones al diario oficial Granma.
Hernández González reconoció que la situación, unido al déficit de leche en polvo experimentado en el último trimestre de 2019, ha afectado la cobertura del país.
"Se han tratado de priorizar los compromisos con la canasta normada, las dietas y el consumo social, y no ha existido incumplimiento en las entregas. Las afectaciones se han concentrado, fundamentalmente, en la producción de leche en polvo para otros destinos, así como en la fabricación de yogur y helados", explicó.
En Cuba, además del Combinado Lácteo de La Habana, los otros centros que producen leche en polvo son la recién inaugurada Planta de Elaboración de leche en polvo de Camagüey y la Empresa de Productos Lácteos de Bayamo.
La desaparición de la leche en polvo ha recordado a los cubanos el célebre discurso de Raúl Castro el 26 de julio de 2007: "Hay que producir leche para que se la tome todo el que quiera tomarse un vaso de leche, y hay tierras para producirla aquí", dijo en Camagüey.
El Gobierno y la prensa oficial se encargan de subrayar que la causa de la escasez de alimentos que sufren los cubanos es el "bloqueo de EEUU", aunque evitan mencionar la mala gestión económica que por décadas ha hecho que productos como la leche sean un alimento escaso y racionado en la Isla.
Entre los derivados de la leche, no solo el polvo ha entrado en crisis en los últimos meses, sino que también el helado, el queso y la mantequilla escasean en los mercados. Las tiendas recaudadoras de divisas suelen vender la leche en polvo a 5.20CUC (130 pesos cubanos) el kilogramo y, en el caso de la bolsa de 500 gramos, a la mitad de ese precio.
Para quienes no pueden pagar esas sumas, el mercado negro oferta las bolsas a un precio un poco menos "inhumano" (100 pesos), aunque en estos casos la calidad no siempre está garantizada, corroboró DIARIO DE CUBA en enero pasado.
A la situación con la leche se añadió el déficit de polietileno para la fabricación de bolsas. Genisley Hernández González dijo que se han buscado alternativas mediante la producción nacional, pero no ha sido posible cubrir las carencias, que afectan el envasado de leche fluida y yogur de soya.
"Con la materia prima que hemos tenido se ha priorizado la distribución de leche fortificada para niños de cero a un año; mientras que la correspondiente a los infantes de uno a siete años se ha tenido que entregar a granel", dijo.
"Para embolsar todas las producciones la industria necesita mensualmente un volumen significativo de polietileno, el cual no ha arribado al país. Tengamos en cuenta que solo para la canasta familiar normada se distribuyen, cada mes, 2.500 toneladas de leche en polvo, que incluye la leche de los niños, así como las dietas médicas y especiales", precisó Hernández González.
A pesar de ello, el funcionario aseguró que durante la segunda quincena de febrero la situación podría mejorar, pues "los arribos tienden a estabilizarse, de modo que pueda existir suficiente cobertura para producir y envasar el producto".
Los cubanos enfrentan un desabastecimiento generalizado que ha hecho a muchos comparar la crisis actual, una de las peores de los últimos 20 años, con los tiempos del llamado "Periodo especial".
Lo que gobierno oculta deliberadamente es que en las cláusulas adjuntas al embargo norteamericano a Cuba, los productos alimenticios y medicinales están exceptuados de las sanciones siempre y cuando se realicen cash; nada de créditos. Que el gobierno debido a su fracasada política económica centralizada no tenga cash, no es culpa de ningún gobierno de los Estado Unidos de Norteamérica.
¿Hay leche en los hoteles de GAESA? Entonces que se dejen de cuentos.
El ensañamiento de la administración de Donald Trump ha incidido también en la escasés de calabaza en los mercados.
¿Habrá quien en Cuba todavía crea en ese régimen?
¡¡Lo que hace falta es REALMENTE UN BLOQUEO TOTAL Y COMPLETO!! ¡¿Qué pasa, es que acaso los que pueden liquidar al régimen de La Habana le temen por algo...?!