El activista por el bienestar animal Javier Larrea lanzó una convocatoria nacional para reforzar el trabajo de los refugios para animales.
"Cada día se hace más difícil el trabajo de muchos protectores de animales en Cuba y mantener los refugios (mis respetos para quienes han podido y mantienen un refugio), así como llegar a tantos animales desprotegidos y abandonados en las calles", publicó Larrea en su perfil de Facebook. "Por eso he decidido crear Bienestar Animal Cuba (BAC), que busca extenderse por todo el país con ayuda no solo de protectores sino de todas las personas que aman a los animales".
En diálogo con DIARIO DE CUBA, el también estudiante de Derecho explicó que el objetivo de este nuevo grupo es fortalecer las redes de "casas de tránsito" y "casas de refugio"; es decir, "que ciudadanos brinden sus hogares para acoger a mascotas abandonadas en las calles".
Larrea aclaró que no se pretende convertir las viviendas de los voluntarios en refugios, sino "que una familia apadrine y dé cobijo temporalmente al animal que lo necesite hasta que sea adoptado de manera definitiva por otra familia".
"Ese animalito será visitado y seguido bien de cerca por los padrinos o colaboradores que habían cuidado de él", añadió el activista en su publicación de Facebook. "Aunque el perrito sea adoptado, se mantendrá una supervisión sobre su salud y bienestar, y su adaptación al nuevo hogar".
"Queremos unir a quienes deseen ayudar en la causa, sin importar la edad o cuánta experiencia tengan; lo que nos importa es que el voluntario sea afectuoso, aliviar el trabajo de otros, reducir la población de perros callejeros y también de perros en refugios".
Los refugios para animales en Cuba son una iniciativa ciudadana, y sufren la escasez de recursos, así como trabas gubernamentales para mejorar la infraestructura constructiva o conseguir alimentos.
"Hemos pensado hacer un registro de todos los que desean ser padrinos o colaboradores de BAC", comentó Larrea, quien lideró por la parte estudiantil el grupo santaclareño BIENAC, asociado con la Universidad Marta Abreu, en el centro del país.
"Cada uno de los colaboradores que se sumen será responsable de la cantidad de perritos que pueda —subrayó el joven a DIARIO DE CUBA—, y pretendemos que sea solo en el reparto de residencia de la persona. Esto, mientras otra parte del equipo busca un hogar definitivo que adopte al animal".
"Si usted vive en el reparto Vigía de Santa Clara, realizaría el voluntariado en esa zona junto a otros colaboradores que también sea de la misma zona, ejemplificó. La idea no es que se haga responsable de todo el municipio o la provincia donde vive. Si logramos tener colaboradores en todas las zonas, será más fácil el trabajo para todos".
Otro caso común, según Larrea, es el de los "'perritos comunitarios', esos que no tienen hogar; vienen cerca de edificios y casas, pero no debajo de un techo". En esos casos, lo ideal es que "si el voluntario no puede acogerlo en la vivienda, pueda encargarse de darle comida, agua y pasar algún tiempo con él en el día hasta que encuentre un hogar".
Asimismo, el activista hizo un llamado a los veterinarios "que puedan ayudar a los colaboradores en sus zonas para cualquier cuestión de salud" y pidió que se pongan en contacto con él para registrarlos.
"Quienes deseen ser colaboradores deben tener más de 15 años, mantener la comunicación regular con BAC, ya sea a través de correo o alguna aplicación de mensajería instantánea como WhatsApp, Telegram o Messenger", indicó.
"En un futuro, tenemos pensado ayudar económicamente a cada uno de los colaboradores para comprar comida o cualquier cosa que pueda hacer más fácil el trabajo, aunque por ahora el trabajo debe ser con los propios recursos que los voluntarios puedan aportar", concluyó.
Magnifica iniciativa! Ojala tenga exito! Hay mucha necesidad tambien en los animales!
Ojalá tenga éxito. Esa foto es de uno que fue perro....