La caravana de emigrantes que partió la madrugada del sábado de Tapachula, Chiapas, con destino final EEUU solo duró 14 horas. Efectivos de la Guardia Nacional y del Instituto Nacional de Migración (INM) de México evitaron su avance y regresaron a sus integrantes a la estación Siglo XXI, reportó Milenio.
El sábado DIARIO DE CUBA informó que unos 4.000 emigrantes, la mayoría haitianos y cubanos, salieron del parque Don Miguel Hidalgo, de la localidad, con la meta primero de llegar a ciudad de México, donde pedirían una audiencia con el presidente, Andrés Manuel López Obrador.
Según el medio local, al mediodía del sábado llegaron al municipio de Huehuetán; no obstante, varios se fueron rezagando y agentes migratorios los interceptaron. Los que continuaron arribaron más tarde a Tuzantán, donde otros emigrantes se quedaron atrás y se entregaron a las autoridades.
En este municipio, 300 elementos de la Guardia Nacional colocaron un cerco sobre la carretera federal. Por 20 minutos un grupo de haitianos se colocaron al frente de la valla policial y exigieron que les dieran paso, pero finalmente retrocedieron.
Durante todo el trayecto fueron custodiados por agentes policiales y de Protección Civil. La caravana fue disuelta sin que se reportaran enfrentamientos ni lesionados. En la caminata hubo observadores de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH), de organismos no gubernamentales del Estado y del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR).
De acuerdo con Milenio, africanos varados por más de 56 días en Tapachula planearon unirse al grupo, sin embargo, prefirieron quedarse en las afueras de la estación migratoria en espera del documento para transitar por el país.
Luego de darse a conocer la salida de la caravana, la secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero, dijo que el plan es incorporar a los emigrantes a programas de bienestar. Declaró que la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (COMAR) reforzará las acciones del INM, pero rechazó responder si la autoridad contendría la marcha.
"Vamos a darles su identidad, su registro, vamos a asegurarnos de que estas personas tengan la prestación de servicios; vamos a tratar de que se incorporen a todos nuestros programas de bienestar y procurar que tengan la posibilidad", prometió.
El INM informó en la noche del sábado que, en apego a la ley y con pleno respeto a los derechos humanos, llevó a cabo acciones para "invitar" a los emigrantes que conformaron el contingente a acudir al instituto para conocer las opciones de regularización de su estancia en el país.
Detalló que tales acciones se realizaron con apoyo de la Guardia Nacional y la Policía Federal en el municipio de Tuzantán, ubicado entre Tapachula y Huixtla, "cuidando la integridad de los emigrantes".
La autoridad migratoria indicó que tras dialogar con los integrantes del contingente, estos accedieron a subirse al transporte que el INM proporcionó para trasladarlos de vuelta a la estación Siglo XXI y que "cada uno será atendido de manera personalizada".
Emigrantes cubanos que integraban la caravana dijeron a DIARIO DE CUBA que buscaban una entrevista con el presidente de México para lograr poner fin a una larga espera. Han agotado todos los trámites legales para buscar asilo, residencia temporal o permanente. Quieren una solución cansados de esperar. Se les ha terminado el dinero, situación que los ha obligado a vivir en la calle con sus hijos y de la caridad y expuestos a los peligros y la violencia en Tapachula.
"buscaban una entrevista con el presidente de México"...¿y cuántas entrevistas les habían concedido los gobernantes cubanos antes de que decidieran abandonar la isla?