Las autoridades de Honduras detuvieron este martes a 31 emigrantes indocumentados de Cuba y ocho del Congo que ingresaron de manera ilegal al país y cuyo objetivo es llegar a EEUU, informó una fuente oficial.
La detención se registró en el punto de Agua Caliente, fronterizo con Guatemala, cuando los inmigrantes viajaban en un autobús del servicio interurbano, indicó la Policía hondureña en un comunicado.
Todos los extranjeros fueron requeridos durante un operativo policial por "no portar la debida documentación para su tránsito legal por territorio hondureño", con la idea de seguir después en ruta hacia EEUU.
Los inmigrantes permanecen en las instalaciones del Instituto Nacional de Migración en el departamento de Ocotepeque (oeste), señaló la Policía.
La misma fuente indicó que los inmigrantes fueron "rechazados" por las autoridades migratorias de Honduras por "no acreditar la documentación necesaria para poder salir del país", por lo que serán regresados a su nación de origen.
El pasado día 5 de febrero las autoridades hondureñas retuvieron a otros 30 emigrantes de Cuba, diez de Haití y tres de Camerún también por haber entrado de forma ilegal al país.
En 2018 fueron detenidos en Honduras más de 4.000 extranjeros en diferentes puntos aduaneros del país, según cifras del Instituto Nacional de Migración.
En los últimos años se ha incrementado en el país centroamericano el paso ilegal de emigrantes, en su mayoría cubanos y africanos, que abandonan su país con la idea de llegar a EEUU.
La mayoría de los inmigrantes son detenidos por agentes de la Policía hondureña en puntos cercanos a las fronteras de Honduras con Nicaragua y Guatemala.
Miles de centroamericanos —en su mayoría hondureños y salvadoreños— abandonaron su país a mediados de octubre de 2018 en distintas caravanas con el objetivo de llegar a EEUU y solicitar asilo, en un éxodo que causó choques diplomáticos entre Washington, México, Guatemala, El Salvador y Honduras.
En enero de este año, al menos dos nuevas caravanas partieron desde Centroamérica, una de hondureños conformada por unas 1.700 personas y otra de salvadoreños más pequeña, de unos 100 emigrantes.