Miguel Díaz-Canel apeló a las minindustrias locales de materiales de la construcción para llegar a las 50.000 viviendas anuales que se ha propuesto el Gobierno y que hasta ahora ha sido incapaz de levantar para dar respuesta a uno de los problemas más graves que aquejan a la población en Cuba.
Según se dio a conocer en un chequeo del Programa Nacional de Viviendas, la cifra de estas minindustrias asciende a 276 en los 168 municipios del país, recogió el periódico oficial Granma.
El sustituto de Raúl Castro al frente el Gobierno apuntó que, "como mínimo, cada municipio tiene que producir diariamente los elementos que necesita una vivienda, único modo de aumentar el ritmo de construcción actual y llegar a la cifra de unas 50.000 al año".
También convocó a todos los organismos a "prepararse para contar con fuerzas constructivas, porque el plan de edificación de viviendas por la vía estatal también debe crecer".
Acerca de la entrega de subsidios, Díaz-Canel dijo que "los materiales están, pero hay que direccionarlos y controlarlos mejor".
Numerosas personas con subsidios otorgados se han quejado de la lentitud e irregularidades del proceso e incluso han denunciado fraudes y corrupción.
"Tenemos que romper la burocracia en este tema tan sensible", dijo Díaz-Canel, y pidió mayor vigilancia en el cuidado de los recursos "porque parte de la ilegalidad en este tema radica en el desvío de materiales que se destinan para las personas más necesitadas".
Según el medio estatal, el gobernante se pronunció además por cuidar la calidad de lo que se hace en las minindustrias locales.
"Aun cuando algunos de los surtidos se realizan por la vía de trabajadores por cuenta propia o cooperativistas, el Estado tiene que poner las reglas y exigir que se cumplan las normas", señaló.
Asimismo, ordenó publicar en la prensa oficial los resultados de las comprobaciones que periódicamente hace el Ministerio de la Construcción a cada territorio en el tema de la producción local de materiales.
En la más reciente de esas evaluaciones, 19 municipios fueron calificados de mal y las provincias con mayores dificultades resultaron La Habana y Mayabeque.
En la reunión de chequeo, la directora general de la Vivienda del Ministerio de la Construcción, Vivian Rodríguez Salazar, informó que hasta septiembre se habían terminado 17.531 viviendas y las provincias con mejores resultados resultaron Camagüey, Las Tunas, Granma, Santiago y Guantánamo.
La cifra representa apenas el 35% del plan anual del Gobierno.
Igualmente las autoridades prometieron que a partir de la entrada de materias primas para la producción de techos de asbesto cemento y zinc, se asignarán las cantidades necesarias que garanticen, en lo que resta del año, la solución a las afectaciones totales y parciales de cubierta en Pinar del Río, Artemisa, Mayabeque, Matanzas, Sancti Spíritus, Ciego de Ávila, Las Tunas, Holguín, Granma y la Isla de la Juventud.