La delegación cubana al período ordinario de sesiones de la Asamblea General de la ONU, que encabeza el gobernante Miguel Díaz-Canel, implementó la censura de prensa durante el acto al que asistiera este en la iglesia Riverside, en Harlem, New York, este miércoles.
El primer inconveniente para los comunicadores se presentó con un funcionario del Gobierno de la Isla que nunca se identificó y pretendía desplazar a parte de la prensa estadounidense acreditada, para ubicar a medios gubernamentales cubanos que llegaron a último minuto, reportó el canal Telemundo51.
Los medios acreditados estaban listos en el lugar, cumpliendo lo requerido, a las 5:30PM para cubrir el discurso de Miguel Díaz-Canel a las 8. Ya en la capilla, a las 7:40, lo que había comenzado como un simple problema logístico parió sus intenciones reales.
El mismo funcionario apareció con una lista en la que aparecían los medios elegidos: casi todos oficialistas cubanos o aliados al sistema. Las publicaciones The New York Times, The Miami Herald, OnCuba y dos cadenas de televisión, entre ellas Telemundo 51, fueron expulsadas.
Una periodista norteamericana organizadora del evento dijo desconcertada no entender la razón de la lista negra.
Nora Gámez, de El Nuevo Herald, refirió los sucesos en su perfil de Twitter.
I’ve been kicked out of the church where Cuban president Miguel Diaz-Canel will give a speech. No explanation was given.They didn’t allow in @elnuevoherald @MiamiHerald @nytimes @Telemundo51 y @Univision23
— Nora Gámez Torres (@ngameztorres) September 27, 2018
"Aunque sus nombres estén en la lista de acreditados, ellos no los van a dejar entrar", dijo sin otra explicación una trabajadora de la iglesia.
Mientras, el público entraba por centenares a la iglesia. Algunos curiosos, otros orgullosos militantes de izquierda. Ninguno supo qué responder cuando conocieron el acto de censura.
El lunes en la ONU, el gobernante cubano repudiaba la hegemonía y la dominación. El miércoles en la noche, en un evento comunitario, su Gobierno escogió a la prensa, sus agentes secretos se mezclaron con las fuerzas de seguridad pública y todo eso, en el centro de Nueva York.
No fue ese el único incidente con la prensa en el que participaron los invitados cubanos. El periodista oficialista de la televisión cubana Boris Fuentes tuvo un altercado en el cual ofendió y amenazó al reportero de Univisión Mario Vallejo frente a la misión cubana ante la ONU en Nueva York, por tomar imágenes de una demostración pública frente al edificio.