El cubano Raúl Gutiérrez Sánchez, capturado en marzo por las autoridades colombianas en cooperación con agencias de EEUU y España, y acusado de planear atentados terroristas en Bogotá, será llevado ante los tribunales por el delito de "concierto para delinquir", publicó el diario El Espectador.
La diligencia judicial, que se llevaría a cabo el jueves 5 de julio, no obstante, habría sido aplazada por un requerimiento interpuesto por la defensa del investigado.
El medio local precisó que el nuevo delito que le será imputado al ciudadano cubano será "concierto para delinquir por su supuesto plan de atentar contra el excandidato presidencial Gustavo Petro y el exlíder de las Farc, Rodrigo Londoño".
Gutiérrez Sánchez fue capturado el 12 de marzo de este año acusado de pertenecer al grupo extremista conocido como Estado Islámico o ISIS. SiN embargo, dos declaraciones a medios de comunicación realizadas recientemente complicaron su situación judicial.
A principios de mayo, Gutiérrez Sánchez introdujo otras variables en su versión. Afirmó que había llegado a Colombia para "atentar contra la Embajada de Cuba, el candidato presidencial Gustavo Petro y el líder de las FARC Rodrigo Londoño", alias Timochenko, según recogió RCN Radio.
El cubano negó entonces cualquier tipo de nexo con el llamado Estado Islámico y dijo que pertenecía al "Movimiento Justiciero 51 (MJ51), integrado por exiliados cubanos en Miami y por miembros de la extrema derecha colombiana que tenían como objetivo atacar a políticos de izquierda del mundo", según reportó El Espectador.
"No soy extremista islámico. Sí sigo la religión islámica. Sí iba a atentar contra personas. Me arrepiento de no haber cumplido mi misión. Hay que luchar por la ideología y estar dispuesto a morir por esa ideología", declaró Gutiérrez Sánchez.
Tras los señalamientos, la Fiscalía ordenó un nuevo interrogatorio al ciudadano cubano y su defensa pidió que se le practicara un examen psiquiátrico ante Medicina Legal para evaluar su estado de salud mental.
Sin embargo, peritos de la entidad confirmaron que Gutiérrez no tenía ningún tipo de problema psicológico y que era consciente de su realidad.
Tras esto, la Fiscalía determinó imputarle el delito de concierto para delinquir, en una diligencia judicial que se llevaría a cabo el jueves.
En su momento, el fiscal Néstor Humberto Martínez aseguró que el caso del cubano era "un tema de seguridad nacional".
"Yo lamento que esto se haya filtrado a los medios de comunicación porque lo que de verdad importa es avanzar en las investigaciones que estamos haciendo con autoridades (…) Lo importante es que hemos prevenido una actividad terrorista. El terrorismo internacional es una amenaza global", dijo Martínez días después de efectuarse la captura.
En marzo, la Policía Nacional de España dijo haber detectado al cubano por sus mensajes en internet llenos de odio contra EEUU. Los investigadores lo identificaron como un sujeto "altamente radicalizado", que incluso habría adoptado vestimenta y estilos similares a los extremistas de grupos radicales.