Profesionales cubanos de la salud y de otras ramas, residentes fuera de la Isla, dirigieron este lunes una carta a personalidades y comisiones internacionales de derechos humanos en la que denuncian que han sido objeto de "esclavitud moderna" por parte del Gobierno de la Isla, según informó en Facebook el grupo #NoSomosDesertores #SomosCubanosLibres integrado por casi 12.000 miembros.
"Hemos sido objeto de esclavitud moderna por parte del Gobierno de Cuba, condenándonos al denominarnos 'desertores'; castigándonos por ocho años sin tener contacto con nuestros familiares y adjudicarse nuestro salario depositado en Cuba", escriben en la misiva que ya se ha convertido en una petición en Change.org con 400 firmas en menos de un día.
El Gobierno cubano no permite la entrada a Cuba a aquellos que abandonaron misiones gubernamentales médicas, diplomáticas, deportivas u otro tipo. Estas personas no pueden regresar al país durante los ocho años siguientes a su salida.
La misiva de los profesionales cubanos está dirigida a la Corte Interamericana de los Derechos Humanos en San José de Costa Rica, a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos en Washington, a la Organización de Estados Americanos (OEA), Organización de Naciones Unidas (ONU) al papa Francisco y al presidente de Colombia Juan Manuel Santos.
En la carta denuncian hechos que consideran "violatorios" de los derechos humanos y de las leyes cubanas llevados a cabo por La Habana, entre ellos, "prohibirnos ver a nuestras familias, acosar y lastimar psicológicamente a los denunciantes y sus familiares dentro y fuera de Cuba".
Además, los profesionales condenan "la ultrajante situación" a la que son sometidos los profesionales de la salud y otras áreas "en las mal llamadas misiones del Gobierno cubano y su supuesta solidaridad con otros países".
La venta de servicios médicos y profesionales es una de las principales fuentes de ingreso del Gobierno, que usa estas misiones, además, para su proselitismo y para hacer política internacional.
Relatan, asimismo, que en los últimos años más de 6.000 profesionales han salido de Cuba a participar en esas misiones gubernamentales de las que escapaban para radicarse en otros países "siguiendo un mismo sueño de libertad con el anhelo de un futuro mejor y más próspero para nuestras familias".
Los profesionales denuncian ser llamados "desertores" y se quejan de que La Habana se esfuerza "en desacreditar nuestra imagen de profesionales talentosos y sacrificados".
La misiva reclama el derecho de estos médicos y especialistas "a entrar a Cuba y ver a nuestros familiares y que se elimine esta arbitraria medida con la que cubanos ni dentro ni fuera del país, se sienten identificados".
Se quejan, en la misiva, del fin del programa de EEUU de parole para los médicos cubanos, Cuban Medical Professional Parole Program (CMPPP). Y señalan que terminado este programa, el régimen se queda sin "justificación" para la "absurda" regulación de prohibir la entrada a la Isla de los médicos cubanos.
Agregan que esta medida de prohibirles entrar al país durante ocho años viola la Constitución Cubana y la Declaración universal de los derechos humanos (artículos 7, 8, 13 y 15).
"Anhelamos entiendan el sentir de más de 12.000 voces y otras muchas que solo reclaman ver a sus familiares y otros, darle el último adiós que nunca pudo y, por ende, hacerles saber que hemos sido víctimas de historias desgarradoras, muchos seres queridos que se han marchado sin nuestro último adiós", lamentan los profesionales en su misiva.
"Padres, hijos, abuelos, hermanos, amigos, vecinos separados por la distancia, atravesando penosas enfermedades sin tener el alivio del reencuentro. Esto y más está sucediendo hoy con los profesionales cubanos que hemos sido privados de ver a nuestras familias durante ocho años o más como condena por decidir emigrar en ejercicio de nuestra profesión. Exigimos como cubanos pisar nuestra tierra, ver a nuestras familias y dejar de lado el odio perpetuo de quien nos separa", concluye la carta.
Médicos cubanos trabajaban en 62 países al cierre de 2016, en 35 de los cuales el Gobierno cobró por sus servicios, según estadísticas oficiales publicadas en abril.
El Anuario Estadístico de Salud 2016, publicado por el sitio oficial especializado Infomed, no registra la cantidad de profesionales que intervienen en esas misiones, pero según el Ministerio de Salud, a mediados de 2015 eran más de 50.000, la mitad de ellos médicos.
Aparte de Venezuela y Brasil, los mercados más importantes, los médicos cubanos están en países como Qatar, Kuwait, China, Argelia, Arabia Saudita y Sudáfrica.
Los profesionales de la Salud cubanos que trabajan en el exterior suelen encontrarse en condiciones de semiesclavitud. Muchas veces tienen restringida la libertad de movimiento.
El Gobierno cubano se queda con hasta el 75% de los salarios que pagan los países de destino por los profesionales de la Isla. No obstante, la participación en estos programas es un alivio para los médicos, cuyo salario en Cuba no supera los 70 dólares al mes.