El Observatorio Cubano de Derechos Humanos (OCDH) pidió este sábado al Gobierno de la Isla que tras el paso del huracán Irma se elimine "inmediatamente" el impuesto del 10% al dólar americano y que se vuelvan a otorgar licencias a los trabajadores por cuenta propia, indicó el ente en un comunicado.
Asimismo, el OCDH lanzó una campaña para recaudar 10.000 euros "para paliar los efectos devastadores del ciclón y atender las necesidades humanitarias inmediatas de miles de familias cubanas" con comida, agua y medicinas.
Estas peticiones han sido enviadas "ante la difícil y urgente situación que en estos momentos atraviesa la población cubana", precisa el OCDH.
Sobre el impuesto del 10% que el Gobierno de Cuba mantiene sobre el dólar americano, el Observatorio señaló que "es un castigo a la ayuda solidaria que muchos cubanos desde el exterior envían en ocasiones con mucho sacrificio a sus familiares, antiguos vecinos y amigos en la Isla".
Además, también solicitó "la inmediata derogación de la Resolución No. 22/2017 del Ministerio de Trabajo y Seguridad Social, por la cual Gobierno dejó de otorgar licencias para el ejercicio del trabajo por cuenta propia de un grupo importante de negocios. Esta medida limita la autonomía y la capacidad de aporte de los ciudadanos cubanos dentro de la Isla e impide la oxigenación de la economía nacional y en especial la de miles de familias".
En cuanto a la campaña de recogida de fondos, el OCDH explica que la Iglesia católica en Cuba será "quien gestionará estos fondos a través del padre Castor José Álvarez Devesa, Secretario Ejecutivo de la Comisión Nacional de Misiones de la Conferencia de Obispos de Cuba, lo que le permitirá llegar a todas las diócesis de Cuba, valorando la urgencia de las necesidades en cada caso particular y atendiendo siempre a criterios vitales de comida, agua y medicinas".
Las donaciones se pueden hacer a través de la plataforma GoFundMe.
El huracán Irma, que llegó a Cuba con fuerza de vientos de categoría 5 (máxima de la escala Saffir-Simpson) y después se degradó a 4, dejó diez muertos y afectó severamente los servicios de electricidad y agua, derrumbó viviendas, provocó inundaciones y causó destrozos importantes en la costa norte.
Irma ha causado derrumbes y el temor a que más edificaciones se caigan. Asimismo, ha dejado 1.500.000 metros cúbicos de basura solo en la capital y todavía este viernes en la Isla se contabilizaban más de 26.000 personas evacuadas, la mayoría de ellas en casa de familiares y vecinos.
El Gobierno todavía no ha contabilizado el número de viviendas afectadas ni los daños en la agricultura y otros sectores económicos.