Aunque los embalses villaclareños duplicaron el volumen almacenado, según informes de la Agencia Cubana de Noticias (ACN), se mantiene la escasez de agua en varias zonas de Sagua la Grande que estaban desabastecidas ya varios días antes del huracán Irma.
Un cable de la ACN fechado el 12 de septiembre, en Santa Clara, asegura que las precipitaciones relacionadas con el huracán Irma dejaron más de 330 millones de metros cúbicos en un territorio que la pasada semana apenas alcanzaba el 23% de su capacidad de almacenamiento.
Yosmary Gil, funcionaria del Instituto Nacional de Recursos Hidráulicos (INRH), reveló que el país recibió lluvias en una magnitud equivalente a poco menos del 80% de la media histórica correspondiente a septiembre. Villa Clara, por su parte, obtuvo el segundo registro más favorable entre las provincias cubanas y alcanzó el 118%.
No obstante, en Sagua la Grande ha aumentado la carencia de agua tras el paso de Irma, a pesar del beneficio recibido por la presa Alacranes y las fuentes que abastecen a los dos acueductos responsables de surtir a varias localidades del municipio.
Alacranes, el segundo embalse de mayor porte en el país, encabeza la lista de los más favorecidos por las lluvias, declaró Luis Beatón, director de la Empresa de Aprovechamiento Hidráulico villaclareña.
"Llevábamos más de una semana sin agua antes de Irma", refiere una vecina del centro histórico. "Llamé al acueducto y dijeron que no tenían pipas disponibles. Cuando dije en el Partido [Comunista de Cuba] que íbamos a tener un conflicto político en el edificio, me colgaron".
A cuatro días de la retirada de Irma, sigue interrumpido el suministro de agua a la ciudad, pese a la reciente declaración de las autoridades a los medios locales, que aseguran bombear desde la noche del miércoles.
"¡Raúl dijo que el chisme es contrarrevolución!", exclama una vecina de la calle Colón. "Nadie dice por qué no tenemos agua, nada más llegan chismes".
Las comunicaciones oficiales de la Empresa de Acueducto y Alcantarillado, emitidas por la radio estatal, explicaban en días recientes que se trabajaba sin éxito para conseguir la autonomía energética de las bombas. Los medios públicos no reportaron ninguna avería en las infraestructuras propias de la red.
El Consejo de Defensa Nacional para la Reducción de Desastres, reunido el lunes, aseguró que el abastecimiento regular de agua es una prioridad para las autoridades.
Inés María Chapman, presidenta del Instituto Nacional de Recursos Hidráulicos, se refirió a la situación de las ciudades que todavía no resuelven los problemas eléctricos. En su resumen de las declaraciones de Chapman, el periódico Granma indicó que "se está respondiendo a las necesidades de la población a través de grupos electrógenos de emergencia, agua en pipas y carros cisternas".
"En Sagua la Grande no hemos visto una sola pipa de las anunciadas por Granma", dicen en una zona del consejo popular Centro-Victoria que sí se abastecía del acueducto antes de Irma.
"A este paso, queda poca agua para tomar", comentan cerca del parque del Mausoleo, junto a una de las llaves públicas más concurridas de Sagua la Grande. "Antes de Irma veníamos todos los días a cargar cubos, pero ya no cae ni aquí".
En Santa Clara, la capital de la provincia, restablecieron los servicios de electricidad y acueducto en buena parte de la zona urbana.
Según Freddy Pérez Cabrera, corresponsal de Granma, el Grupo Empresarial de la Construcción en Villa Clara declaró la existencia de 70 camiones destinados a la limpieza de escombros.
En Sagua la Grande y Caibarién, segunda y tercera ciudades más populosas, y las más afectadas por Irma, laboran seis camiones que comparten con Encrucijada y Remedios, apunta la nota.