El número creciente de usuarios y un rango de alcance que cubre prácticamente todos los municipios capitalinos han convertido a WifiNet en una opción para que en la ciudad haya al menos apariencia de conectividad. La red social alternativa ha devenido una herramienta popular, sobre todo porque se accede desde la comodidad del hogar. Para poder usarla es necesario estar conectado a la clandestina SNet, la red madre.
"WifiNet te ayuda mucho. Como las tarifas del celular son tan caras puedes usar la red para contactar con tus amigos. Así simplemente les dejo un mensaje en su perfil y les digo nos vemos a tal hora en tal lugar", dice Marcos, de 22 años.
Entre los jóvenes habaneros se ha convertido en habitual preguntar "¿cómo te llamas en WifiNet?". En esta red comparten sus vivencias diarias, fotos de la última salida o cumpleaños. WifiNet ofrece además la posibilidad de acceder a foros sobre series televisivas, artistas, tecnología y amor.
Los foros son regulados por administradores designados entre los mismos usuarios, que poseen también alguna responsabilidad en el mantenimiento físico de la red. Tal vez el más popular de los foros con que cuenta el sitio, después de los dedicados a los fanáticos del fútbol, sea el "Rincón del Chucho". Entrar allí implica quedar expuesto a un trolleo constante.
Los usuario habituales de WifiNet son llamados wifiner@s. En su mayoría son jóvenes y pueden pasar horas frente a sus computadoras. A través de la página se organizan numerosos encuentros en centros recreativos y algún wifinero ha montado su negocio con esto.
"Si me paso el día en WifiNet y tengo más de 2.000 amigos, puedo sacarle dinero", explica Adonis, promotor cultural. "No soy el único que lo hace, pero sí soy de los primeros".
"Lo que hacemos es contactar con algún bar o discoteca y les decimos que vamos a organizar un evento y queremos usar su local", detalla. "Les garantizamos llenárselo a tope. Ellos no cobran la entrada, pero venden mucha bebida. Nosotros hacemos la promoción en WifiNet y después nos dan una comisión. Siempre es un éxito porque la gente quiere conocerse en persona y 'cuadrar' a la wifinera que le gusta".
Algunos de los sitios donde se han realizado las ya populares "fiestas de la red" son las discotecas La Chorrera, El Bosque y La Cascada. También el centro cultural La Guayabera, en Habana del Este, acogerá próximamente uno de estos encuentros.
"Por lo general, las fiestas de la red son superbuenas", comenta Osmel, de 25 años. "Yo creía que eso estaba lleno de locos de las computadoras, que también los hay, pero es una cosa muy variada porque va gente de todo tipo. Incluso los que no están conectados a WifiNet. Al final, siempre se corre la bola y se llena. Terminé abriéndome una cuenta para poder seguir hablando con una chiquita que conocí en la fiesta".
Otras de las fiestas de la red que han adquirido gran popularidad son los encuentros en la playa, que suelen organizarse principalmente en verano y durar toda una noche. El equipo de dirección de WifiNet garantiza la infraestructura básica, como luces y sonidos.
Aunque la ventaja de la comunicación instantánea entre jóvenes podría crear muchas esperanzas de debate, los foros se encuentran bastante limitados.
Alejandro, wifinero de Alamar, cree que con el "control" que hay en el país sobre la información "nadie puede esperarse que la red no esté vigilada".
"Los temas de política y religión son censurados para mantener la cosa funcionando. Aún así, de vez en cuando alguien suelta lo suyo, como la vez de la Manzana de Gómez. Se dio un debate bastante fuerte en los foros sobre si era justo construir un hotel así con las condiciones en que vivimos los cubanos. Se pusieron comentarios bastante ácidos. Pero en general hay que limitarse para que no nos tumben la red. Es internet a la cubana", concluye.