La empresa estadounidense OpenAI, líder en el desarrollo de la inteligencia artificial (IA), lanzó a mediados de mayo ChatGPT-4o, la última versión de su producto estrella. La "o" en el nombre viene del término latín omni (todo). De ahí parte el concepto evolutivo de esta nueva versión: ofrecer al usuario casi todo lo que necesite.
DIARIO DE CUBA conversa sobre este tema con David Chinarro, doctor en Informática e Ingeniería de Sistemas, y experto en IA aplicada a la defensa y seguridad. Él considera que el mayor salto del chatbot ha sido en cuanto a su capacidad de procesamiento: "GPT-4o puede procesar hasta 64.000 palabras, mientras el GPT-3 estaba limitado a 8.000 palabras. Con eso lo que hace es manejar textos más largos, es decir, la capacidad de estos grandes modelos de lenguaje para relacionar una palabra con su contexto (conocido como el attention) es mayor en el GPT-4o".
Chinarro aclara que, además de textos más largos, ahora se pueden procesar también otros que sean más complejos: "Sutilezas del lenguaje, precisiones o generaciones complejas como poemas, con mucha estructura gramatical y literaria, puede procesarlos con mucha más creatividad".
Según un reporte de The New York Times sobre los cambios introducidos por OpenAI, el ChatGPT-4o puede recibir y responder peticiones combinando audio, imagen y texto. La primacía de esta empresa en el sector de la IA se evidencia también en el camino que han seguido sus avances. Cade Metz, el reportero de tecnología del citado medio, lo resumió de la siguiente forma: "Mientras Apple y Google transforman sus asistentes de voz en chatbots, OpenAI está transformando su chatbot en un asistente de voz".
En un mercado creciente, donde se invierten millones de dólares en busca del más mínimo avance, OpenAI se mantiene como el principal referente. "Respecto a los otros chatbots que han salido más frecuentemente, sí se puede decir que ChatGPT-4o es por lo menos más grande. Permite esa amplitud de conocimientos en cuanto a procesar el lenguaje natural. ChatGPT-4o emula al personaje humano con mucha más naturalidad", explicó el experto consultado por esta redacción.
Empresas como Google y Microsoft le otorgan tanta importancia a la escalada tecnológica que mantienen en el sector de la IA, que prefieren sostenerla aunque no les sea rentable. "La competencia es dura incluso perdiendo dinero, como Microsoft ha reconocido. Para ellos no es viable económicamente la versión gratuita de sus chatbots y ni siquiera la de pago", detalla Chinarro.
En cuanto a las potencialidades que tiene la IA de irrumpir en la sociedad, el criterio de este experto se une al de otros entendidos: "Podemos esperar una disrupción tecnológica, es decir, transversal a todos los sectores. Pero no hay que tener grandes temores si lo hacemos progresivamente y con adaptación a los puestos de empleo, por ejemplo. Por supuesto, se va a necesitar muchísimo trabajo y especialistas dentro de este campo".
A propósito de la reciente legislación que aprobó la Unión Europea para regular el desarrollo de la IA, Chinarro opina: "Es una nueva tecnología que penetra en lo esencial de la persona, no solo en sus datos y conocimiento, sino mucho más allá. Llega hasta su forma de sentir y pensar, cosa que pudiera ser manipulada sin que lo sepamos. Entonces necesitamos una cierta capa de protección legislativa. Toda ley que se haga ahora será buena siempre que sea moldeable y actualizable en cortos periodos de tiempo".
Este experto en IA reivindica las potencialidades de los nuevos avances, y considera que pueden ayudar a los ciudadanos de países aislados o atrasados tecnológicamente, como es el caso de Cuba. "Hay mucha IA abierta y gratuita que se puede emplear en infinitos proyectos. Por ejemplo, la mejora y ayuda de la agricultura. Podemos hacer predicciones de cosechas, optimización de recursos, detecciones de plagas mediante los satélites… En medicina, la IA se puede aplicar incluso para dar diagnósticos en sitios donde no estén los equipos o profesionales necesarios. En el campo de la educación, la IA va mucho más allá que el simple acceso a internet: con ella podemos hacer una educación personalizada", concluye Chinarro.
ChatGPT 4o es el mejor ahora en el mercado, pero no es gratis, y aún hace errores llamados halucinaciones, donde da información falsa a algunas preguntas de los usuarios. Por tanto, si un usuario hace una pregunta de conocimiento sobre algo que no sabe la respuesta puede tener errores, y el usuario asumir que eso es verdad. Todavía ni ChatGPT 4o ni sus competidores como Microsoft Copilot, Claude y otros no sirven como fuente confiable de conocimiento. La versión ChatGPT 3.5 es gratis, pero halucina bastante. Actualmente, ninguno son fuentes confiables de conocimiento.