Bernardo Arévalo juró en los primeros minutos del lunes como presidente de Guatemala, en una jornada marcada por protestas ciudadanas ante el retraso del cambio de mando y que pone fin a varios meses de tensiones y acciones de la Fiscalía para retirarle la inmunidad en lo que muchos vieron un intento de evitar que asumiera el poder, reporta la agencia AP.
El nuevo mandatario, que ganó las elecciones en agosto pasado con un respaldo popular de más del 60%, tomó posesión del cargo con un significativo retraso por la dilación del Congreso saliente con las nuevas autoridades, como nunca había ocurrido hasta ahora en el país.
Seguidores de Arévalo se apostaron desde media tarde frente al Legislativo y tuvieron momentos de confrontación con la Policía en protesta para que se concretara la toma de posesión del nuevo presidente. También durante los últimos meses ha habido masivas movilizaciones en defensa de la democracia y para exigir la renuncia de la fiscal general, Consuelo Porras.
Arévalo prometió en campaña luchar contra la corrupción y los intereses de los poderes políticos, en tanto que la fiscalía ha mantenido en los últimos meses una arremetida de acciones judiciales en su contra, de su partido y de todo el proceso electoral en el que resultó ganador.
Hasta tres veces, el Ministerio Público había pedido que le sea retirada la inmunidad al ahora nuevo presidente guatemalteco e incluso planteó que las elecciones debían ser anuladas por un presunto fraude electoral.
Los diputados que componen el Congreso para la legislatura 2024-2028, entre los que figuran 23 parlamentarios del partido Movimiento Semilla, principal apoyo de Arévalo, tomaron posesión de sus cargos una vez clausurada la legislatura 2020-2024, al término de una tumultuosa sesión, con altercados dentro y fuera del recinto parlamentario, reportó EFE.
Los diputados del Movimiento Semilla están suspendidos de sus cargos por orden de un juez penal y de una comisión del Congreso, si bien estas decisiones podrían quedar sin efecto si así lo decide la nueva junta directiva del Congreso y lo vota el pleno de la Cámara, según expertos.
El Movimiento Semilla ha pasado de tener seis escaños en legislatura 2020-2024 a 23 actualmente. En tanto, el opositor partido Vamos, respaldo político del mandatario saliente, Alejandro Giammattei, cuenta con 39 representantes.
El presidente saliente de Guatemala, Alejandro Giammattei, no se presentó personalmente para entregar su cargo al Congreso y lo hizo mediante su secretaria, al argumentar que debía entregar su puesto a más tardar hoy a la media noche.
Giammattei envió a su secretaria personal a entregar la banda presidencial al Congreso, según confirmaron varias fuentes, y de igual forma expresó que no estaría en la investidura del nuevo gobernante.
Enfrentamientos, insultos, diputados encerrados en salones bajo llave y un caos generalizado describen lo que sucedió en el Congreso guatemalteco, según pudo constatar EFE.
Los diputados de la nueva legislatura tenían previsto elegir al mediodía al nuevo presidente del Congreso, pero al filo de las 3:00PM hora local, el Congreso saliente ni siquiera había certificado a los 160 nuevos integrantes del Parlamento.
Esta circunstancia hizo circular los temores de un eventual "golpe de Estado", como ha venido denunciando el propio presidente electo, al acusar a la jefa del Ministerio Público, Consuelo Porras, y “otros actores corruptos” de obstaculizar e impedir su investidura.
Al acto de investidura de Arévalo asistieron unos ocho jefes de Estado, incluidos el rey de España, Felipe VI, y el presidente chileno, Gabriel Boric. El Gobierno cubano envió a la ceremonia al viceprimer ministro Jorge Luis Tapia Fonseca encabezando su delegación.