La ciberseguridad y la protección de datos personales —en un mundo cada vez más digitalizado— se ha convertido en una prioridad para la mayoría de los Estados.
El rico emirato de Qatar, que ha hecho una gran apuesta tecnológica para la celebración del Mundial de Fútbol, ha desarrollado también una potente infraestructura en materia de seguridad informática que le permite espiar a los más de 1,5 millones de visitantes, mientras dure el magno evento deportivo.
¿De qué modo lo hace? El pequeño país del Golfo Pérsico pide como requisito para entrar a su territorio que los visitantes descarguen dos aplicaciones consideradas por muchos expertos como sistemas "espía", debido a la gran cantidad de información que solicitan.
Una de ellas es Ehteraz, que se usa para el monitoreo del Covid-19. Dicha aplicación solicita demasiados permisos al usuario y, con ello, la posibilidad de leer y borrar los contenidos del celular, evita también que el móvil entre en suspensión y deshabilita el bloqueo de pantalla.
La otra aplicación considerada espía es Hayya, de uso obligatorio para el transporte público y para entrar a los estadios del Mundial. Hayya también solicita compartir información personal sin restricción, e impide enviar una solicitud para borrar nuestros datos de la aplicación.
La obligación de que estas aplicaciones las usen todos los visitantes, desde los turistas hasta la prensa acreditada y los futbolistas, ha disparado las alarmas sobre el acceso a información privada que tendrían los servicios de seguridad qataríes.
Al tanto de este problema, la Comisión Nacional de Informática y las Libertades de Francia, así como las autoridades de seguridad alemanas, han recomendado a sus nacionales que lleven un teléfono adicional, con muy pocos datos personales, para conectarse a internet en Qatar.
Pero aun cuando un visitante celoso de sus datos tome medidas de seguridad, en los estadios hay instaladas más de 15.000 cámaras de reconocimiento facial y algoritmos de última generación, con el objetivo de un rápido reconocimiento en caso de ocurrir algún incidente.
Según un estudio de la firma de ciberseguridad alemana Recorded Future, debido a la cantidad de personalidades y empresarios que recibirá Qatar mientras dure el Mundial, otras naciones como Corea del Norte, China e Irán, desplegarán sus sistemas de espionaje para recopilar información valiosa para sus intereses.
La firma europea señala que estos estados realizarían esa labor de espionaje en Qatar sin interferir en el normal desarrollo del evento, ya que son países que tienen buenas relaciones diplomáticas con el emirato.
La polémica alrededor del Mundial de Fútbol de Qatar, país con pésimo historial de respeto a los derechos humanos, ha sido intensa en medios de comunicación del mundo entero y en las redes sociales. Para Qatar, este gran evento deportivo ha servido de ensayo para exhibir un gran despliegue tecnológico en materia de espionaje, aunque la mayoría de los hinchas del fútbol, en medio de la euforia de un gol, apenas se percaten.