Las autoridades de Indonesia localizaron este domingo las cajas negras del avión de Sriwijaya Air que se estrelló el sábado en el mar poco después de despegar de la capital del país, Yakarta, mientras han empezado a recuperarse cuerpos y trozos de la aeronave.
El Boeing 737-500, con 62 pasajeros y tripulación a bordo, se dirigía a Pontianak, en Kalimantan Occidental, antes de desaparecer de las pantallas de radar cuatro minutos después del despegue.
El jefe del Comité Nacional de Seguridad en el Transporte de Indonesia (KNKT), Soerjanto Tjahjono, dijo que se habían identificado las ubicaciones de las dos cajas negras del vuelo SJ 182.
"Con suerte, podremos recuperarlas pronto", dijo el jefe militar Hadi Tjahjanto, sin dar un plazo estimado.
La búsqueda continuará por la noche, dijo un representante del equipo de búsqueda y rescate, pero los esfuerzos se limitarán al escáner por sonar de los barcos.
Todavía no hay pistas sobre la causa del accidente.
Indonesia aún recuerda que 189 pasajeros y la tripulación de un Boeing 737 Max de Lion Air murieron en 2018, cuando el avión también se estrelló en el Mar de Java poco después de despegar del Aeropuerto Internacional de Soekarno-Hatta.
Incluso antes del último accidente, hay más personas que han muerto en los accidentes aéreos en Indonesia que en cualquier otro país en la última década, según la base de datos de la Red de Seguridad Aérea.
Los equipos de rescate llevaron al puerto de Yakarta los restos de la aeronave, incluyendo el radioaltímetro del avión, paracaídas de emergencia y una pieza que se sospecha que se habría desprendido de la parte inferior de la cola del avión, dijo el investigador de la KNKT Nurcahyo Utomo.
Un trozo de metal retorcido tenía los colores azul y rojo de Sriwijaya Air. Las autoridades dijeron que procedían de una profundidad de 23 metros cerca de un grupo de islas de la costa de Yakarta.
Las autoridades indonesias dijeron que también habían recuperado partes de algunos cuerpos y ropa. La Policía pidió a las familias que proporcionaran información como registros dentales y muestras de ADN para ayudar a identificar los cuerpos.
El avión viajaba con 12 tripulantes y 50 pasajeros a bordo, todos indonesios, y entre ellos diez niños.
El presidente del país, Joko Widodo, hablando desde el palacio de Bogor, expresó su "profundo pesar" por el desastre e instó al público a rezar para que se pudieran encontrar a los desaparecidos.
Familiares desesperados esperaban en Pontianak a unos 740km de Yakarta para recibir noticias de sus seres queridos. En el principal aeropuerto de Yakarta se estableció un centro de crisis para las familias.
"Nos sentimos impotentes, solo podemos esperar y esperamos obtener pronto cualquier información", dijo a los periodistas Irfansyah Riyanto. Cinco de sus parientes viajaban en ese vuelo.
El servicio de rastreo Flightradar24 dijo que el avión despegó a las 2:36 de la tarde hora local (0736 GMT) y subió a una altura de 10.900 pies en cuatro minutos. Luego comenzó un descenso pronunciado y dejó de transmitir datos 21 segundos después.
No hubo pistas inmediatas sobre lo que podría haber causado el descenso repentino y los expertos en seguridad subrayan que la mayoría de los accidentes aéreos son causados por un cóctel de factores que pueden tardar meses en determinarse.
Una portavoz del Ministerio de Transporte dijo que el control de tráfico aéreo del Aeropuerto Internacional de Soekarno-Hatta había preguntado al piloto por qué el avión se dirigía al noroeste en vez de continuar con su ruta de vuelo habitual, unos segundos antes de desaparecer.
Los pilotos tenían décadas de experiencia.
El Boeing 737-500, de casi 27 años de edad, tenía mucha más antigüedad que el modelo 737 MAX, plagado de problemas que se estrelló en Yakarta a finales de 2018, matando a las 189 personas.
"Estamos en contacto con nuestros clientes de la aerolínea y estamos listos para apoyarlos durante este difícil momento", dijo Boeing en un comunicado. "Nuestros pensamientos están con la tripulación, los pasajeros y sus familias".
Fundado en 2003, el grupo Sriwijaya Air, con sede en Yakarta, vuela principalmente dentro de Indonesia. La aerolínea tiene un sólido historial de seguridad hasta la fecha, sin que se hayan producido víctimas a bordo en cuatro incidentes registrados en la base de datos de la Red de Seguridad Aérea.
En 2007, la Unión Europea vetó a todas las aerolíneas indonesias tras una serie de accidentes e informes de deterioro en la supervisión y el mantenimiento desde la desregulación a finales de la década de 1990. Las restricciones se levantaron por completo en 2018.
El que se monte en un avión de Indonesia es suicida.
Después dicen que Sacha Baron Cohen es un comediante, a ver si alguien sabe dónde queda Kalimantan Occidental. Lo tuve que buscar en Google.